El mundo de la actuación puede parecer muy glamoroso desde los ojos del espectador, pero una mirada más interna puede revelar que no todo es tan color de rosa como lo captan las cámaras de televisión y los paparazzi. Ana María Orozco, protagonista de Betty, la Fea, es uno de los varios casos que sirven como ejemplo dadas las dificultades que vivió después de finalizar la famosa telenovela.
Si bien muchas personas pensarían que después de cosechar un éxito tan grande como lo fue -y lo sigue siendo- esta telenovela, la verdad es que para la actriz colombiana fue todo cuesta arriba. En vez de verse abrigada con toda la fama y el éxito de su producción, realmente sufrió varias calamidades para su vida personal.
El infierno que vivió Ana María Orozco al finalizar Betty, la Fea
Uno de los eventos más destacados en la vida de la actriz después de protagonizar Betty, la Fea se trató de su divorcio con su pareja Julián Arango, a quien conoció durante el rodaje de la también telenovela colombiana Tiempos Difíciles, en 1997. Seguidamente, volvieron a coincidir para la novela Perro Amor, según reseña el portal Las 2 Orillas.
Dada la frecuencia con la que se veían y la buena química que tenían tanto frente como detrás de cámaras, la pareja decidió atar el nudo y contraer matrimonio en 1999, mismo año que se estrenó la telenovela lanzaría al estrellato a Ana Maria Orzoco y en donde también compartiría varias escenas con su esposo.
Sin embargo, el paraíso duró poco tiempo ya que después de algunos meses de unión la pareja optó por divorciarse. Esto hizo que la actriz pasara algunos momentos incómodos en el set de Betty, la Fea porque la relación no terminó en los mejores términos.
Migración y adaptación
Una vez que finalizó su papel en la famosa telenovela, Ana María Orozco se había consolidado como una de las actrices latinas más famosas del momento, llevándola a ser altamente reconocida en muchos lados, en especial en Colombia.
Pero por lo general la fama viene acompañada del dinero. Esto se convirtió en un problema para ella, ya que según declaró en una entrevista para un periódico argentino, era muy riesgoso que la conocieran por ser una mujer de mucho dinero en Colombia ya que se prestaba para ser víctimas de secuestro. Esto, aunado con otras situaciones personales, la llevaron a hacer vida en Argentina.
Dada su fama, la actriz de Betty, la Fea figuró en muchos programas de entrevistas argentinos, acompañando sets con figuras como Diego Armando Maradona y Ricky Martin. Sin embargo, su personalidad retraída y tímida hicieron que los comentarios algo subidos de tonos de los presentadores de la localidad no fueran muy bien recibidos por ella.
Más relaciones rotas luego de Betty
Luego de unos años de terminar su matrimonio con el actor Julián Arango, Ana María Orozco le daría una nueva oportunidad al amor con el músico Martín Quaglia, casándose con él en 2005.
Esta unión le daría a Orozco a sus dos dos hijas, Lucrecia y Mía. Con su nueva familia formada, se dedicó a criar a las pequeñas por un rato antes de volver al mundo de la actuación. Sin embargo, a pesar del tiempo que estuvieron juntos, su nuevo matrimonio volvió a deshacerse en 2013.
Pero ese mismo año, la actriz de Betty, la Fea había conocido a su compañero de set Maximiliano Ghione con quien luego de varios rumores de romance, haría pública su relación.
Pero si bien todo parecía un cuento de hadas, de un momento a otro su relación llegó a su fin, anunciando con un tuit su separación: “Es oficial: Ana María Orozco y yo ya no tenemos ninguna relación. Fue muy lindo. Y así es la vida. Un abrazo?”, escribió Ghione.
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