La segunda temporada de Sweet Tooth está siendo solicitada por la fanaticada que se ha enternecido y enamorado de esta historia que, hasta ahora, es una de las más vistas durante la pandemia y que además ofrece diversas alternativas de entretenimiento, ya que posee muchos elementos claves que la han llevado al éxito. Su protagonista, así como los argumentos y demás escenas la han posicionado como una de las mejores y más auténticas apuesta de estos tiempos.
Por eso, aquí te indicaremos algunas de las razones por las que no puedes perdértela este fin de semana si aún no la has visto. La recomendación es apreciarla de principio a fin, ya que no posee desperdicio. Es una apuesta novedosa, enternecedora y sobre todo repleta de esperanza y mensajes de optimismo que son muy útiles en la actualidad.
Razones para no perderse la segunda temporada de Sweet Tooth
Aunque la nueva entrega aún no ha sido confirmada, se espera que muy pronto sus realizadores den noticias sobre ello, pues ha sido tanto el impacto de ella que el público quiere seguir disfrutando de la frescura de esta trama en la que el sello de DC Cómics se desprende de los acostumbrados superhéroes para dar protagonismo a un niño que es mitad humano y mitad ciervo y que debe lidiar con la persecución que representa su condición en la sociedad que lo consideran un «monstruo». De ahí se desarrolla una gran cantidad de situaciones que hacen que esta trama tenga cada vez más fuerza en la industria streaming y por eso, aquí te indicamos las razones por las que no debes dejar de verla:
DC Cómics presenta un personaje diferente al de los superhéroes: Este importante sello que posee una gama amplia de personajes emblemáticos y basados, en su mayoría en cómics, presenta ahora una propuesta muy diferente en la que se muestra que no se necesita tener superpoderes para transformar a la sociedad, ni mucho menos poseer el reconocimiento mundial para ser admirado y hasta respetado por la nobleza de su corazón que es la que, sin duda, le da un interesante giro a esta historia.
Posee mensajes llenos de esperanza: Esta producción creada por Jim Mickle que se basa en el cómic de Jeff Lemire y que lleva el mismo nombre no maneja el tema pandémico como referencia de algo catastrófico, por el contrario, pese a que habla sobre un virus que ataca a una población y por ello ocurren ciertas mutaciones, también habla de cómo los seres humanos a través de sus acciones son capaces de sanar el planeta y orientarlo a ser más llevadero en situaciones que obligan a no mantener contacto con el resto de la humanidad. Además habla de cómo a través del amor se pueden lograr impactantes cambios.
Protagonista que enternece con su impecable actuación: Gus es quien lleva el peso de toda la trama, este niño es interpretado de forma magistral por Christian Convery quien se encarga de demostrar que aún existen personas que no conocen la maldad, que poseen un corazón noble y que a través de sus buenas acciones son capaces de transformar desde pensamientos hasta la más inimaginables situaciones que puedan afectar un entorno.
Este joven llega a esta historia además para confirmar que no es necesario poseer músculos y un gran tamaño para saber manejar el poder del amor y la pureza e inocencia. Sus argumentos y escenas suelen remover las fibras de las emociones y esto es algo que el público agradece, pues han descubierto a un personaje muy noble que solo tiene en mente su misión de ser feliz y querido por el resto.
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