Denuncian al cantante Christian Nodal por comprar un mono araña bebé

Piden “aplicar la ley” para el cantante Christian Nodal tras presumir la tenencia de esta especie protegida por la Procuraduría de Protección al Ambiente.

El cantante Christian Nodal mostró días atrás en su cuenta de Instagram que estaba recibiendo a “una princesa” en su casa. Se trata de una nueva mascota, y no es un perrito sino un mono araña bebé, a la cual ya le puso como nombre “Piaf”.

A pesar de que los fans del cantante celebraron la nueva adquisición por el amor que siente y que ha demostrado por las mascotas en las redes, parece que no a todos les gustó.

El comunicado contra el cantante Christian Nodal

Y es que en Facebook “Voluntarios Informados”, denunció que el cantante adquirió sin dejar claro bajo qué circunstancias, al animalito. Especie que está protegida por la Procuraduría de Protección al Ambiente (PROFEPA). El comunicado señala que él sería cómplice de un delito federal al haber adquirido. Por lo que los voluntarios piden que al cantante se le aplique la ley y no se libre de ella.

De acuerdo con la PROFEPA: “el Mono araña es una especie enlistada en la Norma Oficial Mexicana NOM-059-SEMARNAT-2010, dentro de la categoría en Peligro de extinción.

Así como en el Acuerdo de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES). En el estable que su “venta, compra, transporte y posesión representan un delito federal punible”.

“Podemos lograr que se viralice y esperamos que le llegue a un personaje llamado Christian Nodal, un popular cantante mexicano. ¿Por qué? Pues porque desafortunadamente él está siendo cómplice de un delito federal al adquirir y presumir recientemente que posee de mascota a un mono araña bebé”, dice la denuncia.

Agregaron que lo verdaderamente preocupante de la situación es que “con total impunidad se difunde la nota en diversos medios digitales celebrando la acción”. Manifestaron su preocupación a como se normaliza la tenencia ilegal de fauna silvestre y se da un mensaje claro.

“Si un personaje que está constantemente en el ojo público no es siquiera cuestionado por la autoridad, ¿qué podemos esperar que suceda en los ámbitos más clandestinos? ¿Es tan poco importante la conservación de la biodiversidad que a pesar de mostrarte en público cometiendo un delito ambiental no recibirás castigo?”.