Los huevos son considerados uno de los alimentos más consumidos por su versatilidad al ser incluidos en infinidad de recetas dulces y saladas, así como por los nutrientes que ofrecen a la salud. Además, es uno de los ingredientes que hay que cuidar con especial cuidado, porque de no conservarlos adecuadamente pueden ocasionar enfermedades como la salmonelosis o salmonela. Por eso, después de comprarlos debes tomar las precauciones apara evitar además su descomposición natural.
Cómo conservar los huevos adecuadamente
Este alimento por lo general se consigue en los supermercados en el área de los frigoríficos, pero según lo señala el portal del Instituto de estudios del Huevo, una vez adquirido éstos deben ser llevados a la nevera y mantenerse guardados en su envase.
Además, sugieren que:
- No deben mantenerse en temperatura ambiente ya que no soportan los golpes o cambios de temperatura bruscos, ya que estos deteriora la calidad de sus nutrientes.
- No deben lavarse para ser guardados en la nevera, porque se puede activar un proceso de contaminación del exterior de la cáscara a su interior a través de los diminutos poros que posee.
- Una vez rota la cáscara y si se desea separar la yema de la clara, no usar la cáscara como método de separación, porque puede poseer algunas bacterias.
- Tampoco resulta favorable el romper el huevo con el envase en el que se añadirá.
- Lavarse las manos para su manipulación ayudará a conservar una adecuada higiene del alimento.
- Los huevos solo pueden lavarse cuando se vayan a usar de inmediato.
- Una vez usados, la cáscara debe botarse en la papelera y no conservarla o colocarla cerca de otros alimentos.
