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La Procuraduría Federal de la Defensa del Trabajo (PROFEDET) y de la Inspección Federal del Trabajo vigilar que los trabajadores no sean objeto de intimidación, amenazas, represalias o despidos en la planta de General Motors en Silao, Guanajuato.
Lo anterior, luego de que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) validara el término del contrato colectivo de trabajo celebrado entre el Sindicato “Miguel Trujillo López”, perteneciente a la CTM.
“Esta determinación se deriva de los resultados de la consulta de legitimación del contrato colectivo realizada el pasado 17 y 18 de agosto”, se informó.
En esa votación se tuvieron 3 mil 214 votos en contra y 2 mil 623 votos a favor de ratificar el acuerdo laboral vigente.
En total, la dependencia federal reportó que se tuvo una participación del 90% de la plantilla laboral.
La resolución de la STPS obliga a General Motors a garantizar el respeto de todos los derechos y prestaciones adquiridas en el contrato colectivo.
“Las relaciones laborales se regirán por contratos individuales hasta la firma de un nuevo contrato colectivo”, se explicó.
Tras la salida del sindicato de la CTM, los trabajadores decidirán si mantienen sus trabajos individuales con la ensambladora u optan por otro sindicato.
