MORELIA. El cardenal Alberto Suárez Inda calificó como falsas y sin sustento las publicaciones periodísticas y versiones que ponen en duda el presunto secuestro del sacerdote José Alfredo López Guillén, párroco de la comunidad de Janamuato, en el municipio de Puruándiro.
En un video difundido por la Arquidiócesis de Morelia, el jerarca católico defendió la hipótesis del secuestro del prelado, encargado de la parroquia de la Santísima Trinidad.
«Respecto al lamentable hecho de la desaparición del padre José Alfredo López Guillén, sacerdote de esta Arquidiócesis de Morelia, debo advertir que han circulado informaciones sin sustento y algunas absolutamente falsas», mencionó.
Agregó que la Arquidiócesis a su cargo cuenta únicamente con información sobre que López Guillén aún estuvo con varias personas no identificadas en la casa parroquial durante la noche del lunes 19 de septiembre, mientras que su vehículo fue localizado abandonado y accidentado la madrugada del martes.
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«Lo único que podemos asegurar es que el lunes 19 pasado por la noche todavía estuvo en la casa parroquial con algunas personas cuyos nombres desconozco, y que el martes por la madrugada, día 20, fue encontrado su vehículo accidentado y abandonado en un paraje cercano a la población de Quiroga», precisó.
Suárez Inda llamó a los medios de comunicación a apegarse a la verdad, dejando entrever su inconformidad por la filtración que realizó la Procuraduría de Justicia de Michoacán de imágenes y un video a una agencia de noticias, la cual asegura que el sacerdote estaba con un menor de edad en un hotel de Puruándiro.
«Por ahora, lamentablemente no puedo brindar mayor información, agradezco a los medios de comunicación su interés pero les pido que se apeguen a la verdad, las autoridades siguen el proceso de investigación. Agradeciendo tantas muestras de solidaridad quiero pedir a todos su oración pidiendo a nuestro señor por el bienestar del padre José Alfredo», señaló.
Adrián López Solís, secretario de Gobierno de Michoacán, advirtió ayer que las investigaciones que realiza la PGJ ponen en duda el secuestro del sacerdote católico, aunque dijo que el gobierno del Estado continúa con las indagatorias.
“No queremos nosotros adelantar juicios, estamos esperando que haya avance en la investigación; ya se localizó el vehículo, ya hubo información recabada en los lugares donde fue visto por última vez el sacerdote, hay evidencias que pueden conducir a otro tipo de hipótesis, sin embargo queremos ser cuidados porque hasta este momento no ha aparecido el prelado”, sostuvo.
