La aprobación ciudadana a la gestión del presidente François Hollande cayó a su nivel más bajo desde el inicio de su mandato en 2012, hasta alcanzar un 4 %, según los datos revelados hoy por el Centro de Investigaciones Políticas (CEVIPOF).
Según las cifras del estudio, que encuestó a 17.047 personas, el 70 % de los participantes dijo no estar satisfecho con el mandatario socialista, mientras un 26 % afirmó no tener una respuesta concreta sobre la política del presidente.
La cifra del 4 % de aprobados es la más baja registrada por CEVIPOF desde que el centro inició el lanzamiento de varios sondeos en noviembre de 2015, dirigidos a palpar el sentir de la ciudadanía respecto a las acciones de Hollande.
En noviembre, la aceptación del jefe de Estado galo era de un 12 %, número que bajó hasta el 8 % en enero de este año tras la controversia generada por la propuesta del Gobierno de quitar la nacionalidad a personas acusadas por terrorismo.
La aprobación en julio de la Ley de Trabajo, que provocó la movilización de miles de personas en las calles, asestó otro golpe a la imagen de Hollande.
Ahora, las confidencias del jefe de Estado a dos periodistas, publicadas la pasada semana en un libro y en las que ataca a jueces y crítica al Islam y a la inmigración, marcan el último choque del presidente.
A su vez, Hollande ha visto crecer la oposición en su contra de correligionarios del Partido Socialista (PS), que rechazan que se presente a la reelección en 2017.
Hasta la fecha, el presidente no ha confirmado si, en efecto, buscará un segundo término presidencial, para el cual deberá asistir a las primarias del PS en enero.
La primera vuelta de las presidenciales tendrá lugar el 23 de abril de 2017 y, si fuera necesario, una segunda vuelta se celebrará el 7 de mayo.
En ellas, tantos el centro-derecha de los Republicanos como la extrema-derecha del Frente Nacional (FN) parten con ventaja sobre los socialistas, de acuerdo con los sondeos.
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