El calor extremo que se ha registrado en los últimos días en la Ciudad de México ha sido benéfico para algunos comercios.
La Cámara de Comercio Servicios y Turismo en Pequeño de la Ciudad de México (Canacope) estimó que se ha generado una derrama económica cercana a los 260 millones de pesos por el consumo extra que los capitalinos realizan para mitigar los estragos de las altas temperaturas.
El organismo explicó que por las condiciones del clima se realizan compras no consideradas. Por ejemplo: una botella de agua diaria, o una agua fresca de sabor, un helado o paleta, refresco frío u otra bebida. Esto representa un gasto promedio de 60 pesos más en la última semana.
De acuerdo a los reportes de farmacias, el consumo de bloqueadores y bronceadores aumentó en un 4% por ciento, lo que se considera normal.
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Los negocios que aumentaron sus ventas durante la última semana son: Peleterías, neverías y aguas frescas. Además de las recauderías, cervecerías, farmacias y locales de fruta en mercados.
No todas son buenas noticias, pues la Canacope estimó que se incrementó en 7% el consumo eléctrico en los hogares por el uso de ventiladores y sistemas de aire acondicionado.
Problemas psicológicos por el calor
El doctor Hugo Sánchez Castillo, académico de la Facultad de Psicología de la UNAM, señaló que en casos extremos el calor puede afectar nuestra conducta.
En entrevista con Publimetro indicó que la exposición continúa a la las altas temperaturas pueden generar deshidratación, calambres, visión borrosa e incluso accidentes cerebrovasculares.
Explicó que al existir deshidratación se producen alteraciones como por ejemplo falta de concentración e irritabilidad.
“Puede incrementar la irritabilidad, de hecho cuando los sujetos son puestos en condiciones de calor extremo se pueden tener problemas en cuanto a una respuesta más agresiva, esto podría ser una implicación bastante severa si no se controlan mucho estas situaciones”, comentó.
Sin embargo, precisó que estos efectos por el calor no son crónicos y que la cronicidad va a depender del tiempo de exposición que tengamos.
“Lo que sí es cierto es que sí hay alteraciones conductuales que a veces no nos damos cuenta: nos ponemos un poco más irritados, disminuye nuestra atención y concentración. Además, no estamos tan duchos en lo que estamos haciendo, y en eso es lo que tenemos que estar pendientes”, apuntó.
Por último, el Psicólogo pidió estar al pendiente de nuestra sintomatología cognitiva para evitar afectaciones.
“Si empiezo a ver que mi presión empieza a caer, que no me estoy pudiendo concentrar, inclusive si mi lenguaje se ve afectado, significa que podría estar teniendo un golpe de calor que está disminuyendo mi funcionamiento de forma general”, concluyó.
El dato:
- La actividad comercial se ha visto disminuida entre las 11:00 y las 15:00 horas.
- La temperatura máxima de este jueves fue de 31 grados.
- El 27, 28 y 29 de mayo se registraron los valores más altos de rayos UV (11+).
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