El Tribunal Electoral del Estado (TEE) de Nuevo León revirtió hoy los resultados del pasado 1 de julio de las elecciones municipales de Monterrey y Guadalupe, en los que los aspirantes Felipe de Jesús Cantú y Pedro Garza, respectivamente, ambos del Partido Acción Nacional (PAN), mantenían una ventaja en las votaciones.
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Tras el fallo de los magistrados, el TEE ordenó entregar la constancia de mayoría a los candidatos del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Adrián de la Garza Santos, en el municipio de Monterrey y a Cristina Díaz Salazar, en el municipio de Guadalupe.
De acuerdo con la resolución de los magistrados, se anularon varias casillas que presentaban irregularidades, situación que logró darle la ventaja a los aspirantes priistas.
Señalaron además que no habría elementos suficientes para anular la elección en dichos municipios.
La resolución a favor de los candidatos priistas se logró luego de varias impugnaciones que presentaron los candidatos priistas ante las presuntas irregularidades en casillas el día de las elecciones.
Asegura PAN que defenderá triunfo
Ante esta situación, el presidente estatal del PAN, Mauro Guerra Villarreal, subrayó que defenderá hasta sus últimas consecuencias los triunfos obtenidos en las alcaldías, para hacer valer la decisión que ya tomó la ciudadanía y no permitir que el PRI intente robar algo que no obtuvo en las urnas.
“Desde aquí nosotros exigimos y advertimos: no vamos a permitir que nada ni nadie se burle de los ciudadanos de Monterrey y de Guadalupe; las instituciones, los partidos o los candidatos, ganen o pierdan, deben respetar la voluntad ciudadana y nos encargaremos de que así sea”, subrayó en rueda de prensa.
El dirigente estatal panista afirmó que confían en que la decisión del Tribunal no cambié los resultados obtenidos, y que sólo buscan que en todo momento se respeten los principios de legalidad de una elección, lo cual defenderán hasta sus últimas consecuencias.
Puntualizó que al no haber evidencias o indicios de violaciones o alteración de paquetes electorales, al Tribunal Estatal Electoral no le queda más que validar la elección.
“No hay algún elemento que permita concluir que lo que se refleja en los cómputos finales de la elección, sea distinto a lo que los electores ya definieron, no hay ninguna evidencia de manipulación, de violación o de alteración de paquetes o boletas y el Tribunal no puede más que validar esta elección”, señaló.
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