El diputado local electo, Eduardo Santillán, quien será vicecoordinador de Morena en el Congreso de la Ciudad de México, propuso castigar penalmente a los grupos de porros.
Para ello -dijo- una vez que entren en funciones (17 de septiembre) convocarán a una serie de foros y reuniones de trabajo con la sociedad civil, autoridades universitarias y con estudiantiles para crear un frente contra el porrismo, y buscar qué tipo de conducta penal se debe aplicar.
También puedes leer:
UNAM presentó dos denuncias por agresiones del 3 de septiembre
No caigamos en provocaciones que buscan dividirnos: Graue
“La legislación de la Ciudad de México debe sancionar las conductas delictivas que llevan a cabo estos grupos, como las llamadas ‘novatadas’, en donde se pone el riesgo la integridad física de los estudiantes, además de agravarse los delitos que resultan de este tipo de organización, por lo que será necesario contemplarlos en el nuevo Código Penal, la Ley de Seguridad Ciudadana, la Ley de los Jóvenes y la Ley de Educación”, expuso.
0 of 7
De igual forma, precisó que las autoridades capitalinas deben garantizar que en los alrededores de las escuelas de educación media, además de superior, exista seguridad para los jóvenes. Asimismo, comentó las nuevas alcaldías deben establecer un adecuado nivel de coordinación con los planteles educativos para garantizar que las inmediaciones de las escuelas estén bien iluminadas y se haga una revisión del comercio en vía pública.
Por último, pidió a las autoridades locales y federales aclarar la competencia de la investigación sobre los hechos ocurridos el pasado 3 de septiembre en Ciudad Universitaria para evitar que se sigan «echando la bolita» y se retrasen las investigaciones.
Cabe recordar, que la carpeta de investigación abierta por estos hechos en la Procuraduría capitalina es por intento de homicidio y no por porrismo.
Grupos protegidos
Para Imanol Ordorika, académico de la UNAM, los porros en la UNAM cuentan con protección y tolerancia jurídica además de política.
Precisó que la administración capitalina debe investigar quiénes son los que apoyan y lideran estos grupos y además garantizar seguridad afuera de los planteles, de lo contrario -dijo- los esfuerzos que hace la Rectoría para combatir este problema serán insuficientes.
“En los últimos años, la Rectoría de la UNAM ha expulsado alrededor de 300 porros; sin embargo, éstos han seguido operando alrededor de los planteles”, sostuvo.
