La asamblea convocada para este jueves en el Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) Oriente se suspendió sin acuerdos y se convocó a reanudarla el viernes en el auditorio «Ho Chi Minh», después de una marcha de la Bombilla rumbo a Rectoría de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) a las 10:30 horas.
La asamblea que se llevó a cabo este jueves por más de tres horas y media afuera del plantel, en la alcaldía Iztapalapa, para generar peticiones de seguridad y justicia ante el asesinato de la estudiante Aideé Mendoza, sufrió diversas interrupciones de los asistentes del mismo Colegio y de invitados de otros planteles de la UNAM.
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Se discutió exigir respuestas claras sobre el asesinato de la estudiante, mejores protocolos de reacción ante emergencias dentro de las escuelas y la renuncia del director del CCH Oriente, Víctor Efraín Peralta Terraza. Sin embargo, ante gritos y falta de acuerdos se decidió reanudar el viernes.
Si bien esta asamblea no tuvo el éxito que se esperaba, al menos hay que llevarse la firme convicción de que «estamos aquí, nos importa, no somos indiferentes ante la tragedia», dijo un joven con megáfono en mano.
A la asamblea acudieron unos 150 jóvenes, quienes se concentraron en la cancha de basquetbol, en las inmediaciones del CCH Oriente, a donde llegaron algunos encapuchados a quienes se les pidió que mostraran sus rostros.
Aunque se esperaba la presencia del director del CCH Oriente, no se presentó y algunos estudiantes aseguraban que se encontraba dentro del plantel, que permanece cerrado desde el lunes pasado cuando ocurrió el homicidio de Aideé Mendoza Jerónimo.
A varios metros se ubicó el secretario de Prevención, Atención y Seguridad Universitaria de la UNAM, Raúl Arcenio Aguilar Tamayo, quien reveló que se encontraba en calidad de observador para escuchar las demandas de los estudiantes, pero se negó a dar entrevistas.
