Gran Bretaña y la Unión Europea anunciaron el jueves que alcanzaron un principio de acuerdo para el Brexit luego de días de intensas negociaciones. El documento debe que ser aprobado formalmente por el bloque y ratificado por el Parlamento Europeo y el británico.
“¡Lo tenemos! Es un acuerdo justo y equilibrado para la UE y Gran Bretaña y es una prueba de nuestro compromiso para encontrar soluciones”, tuiteó el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, horas antes del inicio de una cumbre con los 28 estados miembro del bloque más tarde en el día.
🇪🇺🤝🇬🇧 Where there is a will, there is a #deal – we have one! It’s a fair and balanced agreement for the EU and the UK and it is testament to our commitment to find solutions. I recommend that #EUCO endorses this deal. pic.twitter.com/7AfKyCZ6k9
— Jean-Claude Juncker (@JunckerEU) October 17, 2019
Por su parte, el primer ministro de Gran Bretaña, Boris Johnson, dijo en Twitter que las dos partes habían cerrado un “gran nuevo acuerdo” e instó a los legisladores británicos a aprobar el texto en una sesión extraordinaria de la Cámara de los Comunes el sábado.
We’ve got a great new deal that takes back control — now Parliament should get Brexit done on Saturday so we can move on to other priorities like the cost of living, the NHS, violent crime and our environment #GetBrexitDone #TakeBackControl
— Boris Johnson (@BorisJohnson) October 17, 2019
Inmediatamente después del anuncio, los aliados norirlandeses de Johnson señalaron que no podían respaldar el acuerdo por las provisiones para la frontera irlandesa.
Johnson necesita todos los votos que pueda recabar para sacar adelante un pacto en un parlamento profundamente dividido y probablemente calmará el júbilo durante la cumbre. La cámara baja británica ya rechazo el documento anterior en tres ocasiones.
Los equipos negociadores llevaban tiempo intentando dar con regulaciones aduaneras y de impuestos que permitan gestionar el comercio entre Irlanda del Norte e Irlanda, donde Gran Bretaña y la Unión Europea comparten su única frontera terrestre.
Tras meses de pesimismo por el estancado proceso del Brexit, los líderes comunitarios se mostraron optimistas esta semana. El presidente de Francia, Emmanuel Macro, señaló el miércoles que “quiero creer que se está ultimando un acuerdo”, mientras que la canciller de Alemania, Angela Merkel, apuntó que las negociaciones estaban “en la recta final”.
El jueves se demostró que tenían razón.
Tras el anuncio sobre el acuerdo, la libra logró su mejor cotización en cinco meses frente al dólar.
Johnson, quien asumió el poder en julio con la promesa de sacar al país de la UE el 31 de octubre a toda costa, comparó el Brexit con el ascenso al Everest.
Tendrá que subir un poco más alto más para convencer al Partido Unionista Democrático de Irlanda del Norte (DUP). La líder de la formación, Arlene Foster, y el jefe de su grupo parlamentario, Nigel Dodds, dijeron que «no podemos respaldar lo que se está sugiriendo en cuestiones de aduanas y consentimiento”, en referencia a la capacidad de decisión que puedan tener las autoridades norirlandesas en el futuro.
La formación dijo que su posición no cambió tras el anuncio del acuerdo provisional.
Los acuerdos de aduanas y consentimiento son cruciales para garantizar la apertura de la frontera entre el territorio británico de Irlanda del Norte e Irlanda, socio de la UE, el principal obstáculo para el Brexit.