Productores de Noche Buena alcanzan un 95% de venta pese a pandemia

Productores de Noche Buena de la región de Atlixco tuvieron que reducir su producción en promedio un 20% debido a la pandemia por el Coronavirus; no obstante, las ventas se cumplieron en un 95%.

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En entrevista con Publimetro, Vicente Nieto Castillo, representante de la empresa Flornatec, comentó que en la región hay cerca de 80 empresas con viveros que se dedican a la producción de dicha planta de temporada y que este año, pese a la contingencia sanitaria, el sector fue poco afectado, pues su labor se realiza al aire libre y con una distancia de más del metro y medio sugerido, por lo que mantuvieron a su personal.

Apuntó que este año, los floristas produjeron alrededor de un millón 600 mil plantas de Noche Buena, mientras que en 2019 fueron poco más de un millón 800, por lo que aunque fue mínima hubo una disminución a fin de no tener mayor pérdida en ventas.

Refirió que los principales compradores provienen de la capital del estado, pero gracias a la promoción y ausencia de producción en otras entidades tuvieron compras del Estado de México, Ciudad de México, Michoacán, Tlaxcala, Hidalgo, Morelos, así como Veracruz, Oaxaca y Tabasco.

Nieto Castillo refirió que los precios se mantuvieron pese a la pandemia y que los insumos sí incrementaron hasta un 10%, los cuales fueron de los 15 a los 300 pesos, siendo las más vendidas las plantas de 30 y 40 pesos.

“Agradecemos a los que acudieron a comprar pese al problema de sanidad, nos ayudan para que siga el empleo en la región, sobre todo de comunidades rurales de donde es la gente que trabaja en los viveros”, comentó.

A su vez, don Alejandro Gómez, productor de Cuetzalan comentó que las ventas se mantuvieron un 70% respecto al año pasado ya que se sembró la mitad de lo de hace un año, es decir cerca de ocho mil plantas, y principalmente fue a mayoristas.

Comentó que en su caso los precios aumentaron cinco pesos debido a la poca producción, así como el aumento en insumos como plásticos y desinfectantes, aunque la calidad fue mejor.

“El problema es la economía, la gente sí se está llevando, pero económico, no hay dinero, no pagan, si pido un precio más alto no puedo vender”, dijo.

También comentó que mantuvo a sus cinco trabajadores porque su labor no implica aglomeraciones y su labor se llevó a cabo con las medidas de higiene y cubreboca.

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