Costos excesivos y un servicio de salud precario son algunos de los abusos por parte de ambulancias irregulares, mejor conocidas como ‘patito’, que se han agudizado en el marco de la pandemia de Covid-19 en la Ciudad de México.
La falta de regulación de las unidades que atienden emergencias en la capital del país y la escasez de las ambulancias por parte de instituciones públicas serían factores que contribuirían al alza de servicios ‘piratas’.
La norma de la Organización Mundial de la Salud (OMS) establece que debe haber cuatro ambulancias por cada 100 mil habitantes, por lo que en la Ciudad de México deberían de existir 368 unidades médicas; sin embargo, el gobierno de la capital cuenta sólo con 60, según una fuente de la Secretaría de Salud local, consultada por Publimetro.
Esas ambulancias pertenecen al Centro Regulador De Urgencias Medicas CDMX (CRUM), el Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM), el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) y la Sedesa.
Además, según esta misma fuente hay en la ciudad hay 457 unidades de atención a emergencias, pero estas pertenecen a empresas o particulares y reconocen que hay otras circulando sin placas. En este último caso, en 2019 se contabilizaron 80 en circulación y el año pasado, este diario quiso actualizar la información, no obstante, autoridades de la Secretaría de Salud, Seguridad Ciudadana, C5 y Protección Civil de la CDMX dijeron desconocer el dato exacto.
Robo de datos
Sobre el incremento de servicios de emergencias ‘patito’, el coordinador Estatal de Socorros y Desastres de la Cruz Roja en la CDMX, Rubén Rodríguez, declaró a Publimetro que las ambulancias irregulares escanean sus frecuencias y se roban los datos con la finalidad de obtener un beneficio económico.
Es decir, cuando un ciudadano llama al 911 por una emergencia, las ambulancias de las instituciones públicas son activadas por el C5, es en este momento cuando las unidades ‘pirata’ aprovechan para hackear los datos y así llegar antes al lugar de los hechos a fin de cobrar por el servicio.
Rubén Rodríguez consideró que es algo ‘poco honesto’ pues ‘abusan de la desesperación de la gente’ y aseguró que la Cruz Roja no cobra por los traslados a comparación de las ambulancias ‘patito’ o las que pertenecen a empresas que sí están estandarizadas y las cuales, por ejemplo, por un traslado de un paciente Covid llegan a cobrar hasta cerca de siete mil pesos.
En este sentido, aclaró que la Cruz Roja no cobra por traslados de emergencias; sin embargo, el cobro se da cuando un paciente ingresa al hospital de esta institución y requiere algún tipo de intervención quirúrgica, entonces, es cuando se aplica una ‘cuota de recuperación’ de acuerdo a un estudio socioeconómico.
Van por regulación
Tras la reciente agresión -en marzo pasado- de paramédicos de una ambulancia particular a elementos de la Cruz Roja, la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, aseguró que acelerará el tema de regulación del sistema prehospitalario y de las emergencias.
Expuso que aunque se tenía planeado trabajar en ello, los esfuerzos se dedicaron principalmente para atender la pandemia, pero afirmó que próximamente entrarán en el procedimiento.
Sobre esta declaración, Rubén Rodríguez coincidió y dijo que no es algo nuevo el tema de la regulación y la competencia con las unidades ‘pirata’, pero en medio de una emergencia sanitaria, se frenó el tema debido a que era muy complicado hacer una certificación de todos en este contexto de salud.
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