Elementos de la policía municipal de Irapuato son acusados por la familia Ramos Cortez por haber asesinado a Cristian Giovanni de solo 12 años el pasado 31 de mayo. Luego de la acusación de una ex policía contra la madre del menor por haberle robado un tinaco, el niño perdió la vida en medio de las investigaciones.
Cuando sus padres habían sido detenidos en su domicilio de la colonia Ampliación Las Américas, el menor arrojó una piedra a una patrulla de los uniformados. Sin embargo, recibió como respuesta disparos de un policía. Los proyectiles de bala le perforaron un riñon, lo que lo condujo a la muerte.
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Además, su hermano de 17 años también fue agredido por los municipales. Sin embargo, no falleció. En cambio, Cristian Giovanni perdió la vida dentro de un hospital al que fue trasladado. Después de una cirugía y la pérdida del riñon, murió en el nosocomio, según indicó su tía .
Al lugar de los hechos se movilizaron elementos de la policía de Irapuato para encubrir a los culpables. Al menos tres patrullas, con seis agentes cada una, llegaron a protegerlos y retirar los casquillos.
De acuerdo con el secretario de seguridad ciudadana de Irapuato, Pedro Cortés, los agentes no hicieron uso de las armas de fuego contra el niño. Por lo tanto, los policías siguen en funciones sin ningún proceso de investigación abierto.
«Ellos refirieron que no hicieron uso de las armas de fuego. Esa información es la versión que ellos nos dan», dijo.
