El esfuerzo de los atletas mexicanos en los pasados juegos Panamericanos de Lima no debe acreditarse a nadie más que a los propios atletas. Siempre ha existido la tentación de los gobiernos para presumir logros que no les corresponden. Tanto autoridades deportivas como de carácter estatal o federal intentan de manera recurrente celebrar victorias que no consiguieron.
Mucho menos pensar que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador tuvo algo que ver con lo conseguido por los atletas panamericanos y no se trata de señalar la falta de apoyos de su administración, sino que es impensable que el esfuerzo se deba a un cambio de régimen de 8 meses atrás.
Habrá tiempo para, en unos años, evaluar los apoyos de la nueva administración para el deporte. Hoy es de muy mal gusto ver a la senadora Ana Gabriela Guevara adjudicarse algo que no logró, peor aun cuando ella pronosticaba un pobre rendimiento de los atletas mexicanos en la justa panamericana. Ridículo entregarle una medalla al presidente López Obrador cuando no tiene ningún sentido que se le atribuya algún logro deportivo.
Nadie puede negar que Ana Gabriela Guevara fue una atleta importante para nuestro país, ella también vivió como deportista los problemas que sufren durante su preparación de cara a alguna competencia. Hoy es lamentable que se comporte como un político mas del montón, oportunista y colgándose medallas que no le corresponden.
El impulso al deporte debería ser una política pública fundamental para el desarrollo del país. Bienvenidos los apoyos que se otorgarán por la venta de la casa de Zhenli Ye Gon, pero esos se dan de manera accidental, sin ninguna estrategia y casi por presión sobre lo acontecido en Lima. Lejos de ello, los recortes presupuestales preocupan más de lo que alegra la venta de la casa del personaje de origen chino.
Los atletas panamericanos nos dieron muchas alegrías en días pasados, tanto los ganadores de medallas como los que compitieron toman la decisión de dedicar su vida al deporte, sin apoyos y a pesar de que los políticos los utilicen. La vida de un deportista de alto rendimiento no es sencilla, ojalá que el gobierno aplauda menos y apoye más. Solo los deportistas y sus familias saben que el esfuerzo es suyo, sin regateo.
Últimas palabras
Rosario Robles Berlanga fue ingresada al Centro Femenil de Reinserción Social de Santa Martha Acatitla aproximadamente a las 08:35 hs. Un tema que lejos de concluir apenas comienza.