Aunque en distintas zonas de México el calor ya se siente de nueva cuenta (o de plano, nunca se fue del todo), está a la vuelta de la esquina el equinoccio de primavera, con lo que el invierno se despide y la Tierra comienza a renovarse y florecer.
Este momento en el calendario es idóneo para cerrar ciclos y abrirse a los nuevos, cargando el cuerpo de las energías que emana la naturaleza.
Tres lugares para recargar tu batería este equinoccio de primavera
Aquí tenemos una triada de opciones que te permitirán salir de la ciudad y despejarte durante el equinoccio de primavera y regresar a tus actividades con energías renovadas.
Tamtoc, San Luis Potosí
A hora y media de Ciudad Valles, en San Luis Potosí, se encuentra el sitio arqueológico de Tamtoc, que significa “lugar de las nubes de agua”. Puedes recorrer sus rincones en aproximadamente una hora, para quedar maravillado con su arquitectura prehispánica, conformada por 70 estructuras, cuyas dimensiones fluctúan entre los 21 y los 36 metros de altura y un museo de sitio que abunda sobre la información del lugar.
Durante la temporada del equinoccio de primavera, los lugareños realizan ceremonias y ritos inspirados en la cosmogonía y filosofía prehispánicas, como “La Bendición de la Semilla”, la cual es celebrada por un médico tradicional. Durante el ritual, los participantes saludan al sol levantando los brazos para que éste llene de energía a sus semillas y cuerpos, con lo que se busca establecer un equilibrio entre la naturaleza y los seres humanos. La ceremonia se reviste con danzas tradicionales y los chamanes llevan a cabo limpias para eliminar vibras negativas.
La Quemada, Zacatecas
La Quemada se encuentra a 56 km de la ciudad de Zacatecas, representa el asentamiento prehispánico más importante en la zona Centro-Norte de México. En el lugar se encuentra un gran salón de columnas con una plaza, una cancha para el juego de pelota y un basamento piramidal denominado Pirámide Votiva, que se conecta entre sí a través de una red de calzadas.
Por las noches, y en especial durante el equinoccio de primavera, la vista de la bóveda celeste es el escenario para cargarse al máximo de la energía que este lugar irradia. Aquí se realiza una actividad llamada “Arqueología Sideral”, en la que, a través de una limpia con flores e inciensos, se busca liberar a los participantes del ritual de las malas energías acumuladas durante los meses anteriores, para después pasar al salón principal donde los visitantes quedan maravillados ante el espectáculo del cielo repleto de estrellas.
Zona Arqueológica de Tingambato
El sitio arqueológico de Tingambato tiene un gran valor histórico ya que en sus construcciones se puede encontrar la influencia de la arquitectura teotihuacana. En el lugar se aprecian un juego de pelota en desnivel, ruinas de diversas habitaciones y plazas, restos de un acueducto y una pirámide de siete niveles con base cuadrada.
Para cargar energía en este lugar durante el equinoccio de primavera, los asistentes visten de blanco porque, de acuerdo las creencias, es el color que absorbe mejor las energías positivas. El ritual se lleva a cabo en la Pirámide de la Luna, donde se realizan diversas danzas, meditaciones y ceremonias, cobijados bajo la luz del sol, con el objetivo de captar toda su energía renovadora y generadora de vida.