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Cuenta con la experiencia. De hecho será su séptimo partido mundialista y Brasil 2014 es la tercera Copa del Mundo en la que participa, pero también le gusta salirse del molde y ser un árbitro polémico.
Así es Marco Antonio Rodríguez, el réferi mexicano que designó la FIFA para dirigir el partido de semifinales entre Brasil y Alemania.
Conocido como Chiquimarco, no es un improvisado: obtuvo su gafete como internacional en 2000 y comenzó su trayectoria mundialistas en Alemania 2006.
Su sexto partido de Copa del Mundo, el duelo entre Uruguay ante Italia, fue uno de los más polémicos en las Copas del Mundo. Marco Antonio Rodríguez no vio la mordida del delantero Luis Suárez a Giorgio Chiellini y expulsó a Claudio Marchisio. Los de la Squadra Azzurra se fueron inconformes con su actuación
No ha tenido miedo a mostrar las tarjetas rojas en los Mundiales. En Alemania 2006, en su segundo encuentro en el evento más grande del balompié, mandó a las duchas a Cyrille Domoraud y Albert Nadj, en el duelo que ganó Costa de Marfil 2-1 a Serbia.
En Sudáfrica 2010 dirigió su tercer y cuarto partidos. Estuvo presente en la goleada 4-0 de Alemania sobre Australia, donde le mostró el cartón rojo al oceánico Tim Cahill; mientras que en la victoria de España 2-1 sobre Chile, mandó a bañar al chileno Marco Estrada.
Chiquimarco es el único árbitro mexicano que ha estado presente en tres Copas del Mundo.
Grandes polémicas
En la Copa Libertadores 2014, el árbitro mexicano obtuvo el récord de la expulsión más rápida del torneo. Corrían apenas 20 segundos en el partido entre Atlético Nacional de Colombia y Nacional de Montevideo, cuando Alejandro Bernal (Nacional) se barrió a Maximiliano Calzada, una jugada que Chiquimarco sancionó con cartón rojo.
Las dos tarjetas amarillas
Marco Antonio Rodríguez se distingue por ser un árbitro que busca protagonismo. En el minuto 46 de la final del Apertura 2011 de la Liga mexicana entre Tigres y Santos, amonestó a Héctor Mancilla y Carlos Morales al mismo tiempo con dos cartones amarillos, uno en cada mano.
El Chiquigel
Hace cuatro años, aprovechó su apodo y su característico peinado con exceso de gel para sacar al mercado su propio producto que lleva por nombre Chiquigel. “Yo mismo lo utilizó”, aseguró en su tiempo el árbitro con dotes de emprendedor.
El árbitro-entrenador
Antes de partir hacia el Mundial de Brasil 2014, Marco Antonio Rodríguez se graduó como entrenador de fútbol. La ceremonia estuvo encabezada por Justino Compeán, presidente de la Federación Mexicana de Fútbol, y Decio de María, presidente de la Liga MX de México.