En medio de la euforia que ha causado Wimbledon, como cada año, la ex tenista Kim Clijsters fue parte de un momento sumamente divertido cuando en medio de un duelo de exhibición invitaron a un aficionado a jugar, pero tuvieron que vestirlo de blanco con ropa de mujer ante la diversión de los presentes.
El juego de exhibición resultó un autentico momento de felicidad, cuando el seguidor que ingresó a la cancha no pensó que se convertiría en el foco de atención al ser totalmente vestido del único color que está permitido por las reglas de Wimbledon.
En cuanto estuvo listo, sólo sacó un par de disparos de su mano derecha y de inmediato se llevó tremenda carretada de aplausos y un enorme abrazo de Clijsters, quien fue la artífice de que el hombre pudiera compartir la cancha, al menos por unos minutos, con ex estrellas del deporte blanco.
