El cierre del 2019 no fue tan fortuito para el matador mexicano Arturo Macías. En septiembre en la plaza de Las Ventas en Madrid, España, sufrió una cornada en el muslo que le provocó daños en peroné y nervio ciático que lo dejaron fuera de circulación el resto del año.
Pero lejos de deprimirse, “El Cejas” se empeñó en la rehabilitación y ya reapareció este domingo en una de las corridas de la Temporada Grande de la Monumental Plaza de Toros México donde en su segundo toro se llevó las palmas tras dos avisos. “Esta cornada para muchos puede parecer una desgracia, para mi ha sido una bendición”, declaró.
-¿Ya estás completamente recuperado de aquella cornada que sufriste en Las Ventas?
«Se podría decir que si porque ya me siento capacitado con la ayuda de un aparato ortopédico que me ayuda a manejar el pie, para sostenerlo a 90 grados. He ido fortaleciendo mi pierna de estos dos últimos meses para acá. La cornada fue hace cinco y hace dos todavía estaba en cama. Me siento fuerte, capacitado para los retos que vienen. Con el aparato ortopédico puedo llevar una vida normal”.
-¿No fue un poco apresurado tu regreso a los ruedos?
«Puede ser que si o no, depende. Cada persona se maneja y siente la vida de una manera distinta. Puede ser a la mejor una inconsciencia para cualquier persona que lo vea por fuera, el hecho de torear con aparato, ponerse delante de un toro, ¿qué necesidad de hacerle pasar al cuerpo todas esas adversidades y esos sinsabores? Pero aquí el tema es que para mi como torero, mi vida y mi amor más grande, mi pasión, es el toreo y sufro más estar lejos de el que estar dentro de esta manera. Yo no creo que sea tan apresurado por la ayuda de la férula que me está ayudando bastante a poder llevar una vida normal».
-¿Cómo fue ese momento cuando el toro te golpeó? Incluso en la imagen de televisión no se ve nada aparatoso pero al momento de que te llevan a la enfermería se notaba tu rictus de dolor
«Fue muy duro. Yo tengo muchas cornadas y muchas me han dolido y esta es de las que más, La cornada vino porque el toro ya estaba muy avispado, muy orientado de donde estaba yo. El toro se me vino hacia mi, en ese momento hizo mucho aire, la muleta me voló y no pude taparle la cara. El toro que ya estaba muy orientado me pegó un derrote en la hombrera y el segundo derrote ya fue directo a la pierna que me levantó y sin ser algo que pareciera más allá del achuchón (empujón). Pues el achuchón me dejó cojo, me reventó la pierna. En el momento sentí que era grave. Llevo ya muchos percances y sabía que me había hecho daño, el hueso, el nervio, no podía apoyar la pierna. Iba entrando a la enfermería y le iba diciendo a mi apoderado que este toro me había dejado cojo y le atiné. Me dolió mucho, fue un dolor inmenso”.
-¿Cómo ha sido la rehabilitación?
«Muy intensa, con muchos dolores. Han sido tres meses de dormir una hora diaria. Los primeros tres meses fueron un calvario, no me hacía ninguna pastilla para el dolor. Y todo el día metido y enganchado en la rehabilitación, muy constante, muy disciplinado en ello y de todo tipo, desde meterte a albercas, agarrar canicas con los dedos y moverlas hacia los lados para empezarles a hacer movimientos, por electros, por medio de energías, masajes, ultrasonidos, rayos X, de todo lo habido y por haber. Y aparte fortalecer, llevo 11 años haciendo yoga, eso me ha dado mucha fortaleza”.
-¿Esta es la peor lesión que has sufrido en tu carrera?
«Puede ser que si. En otra ocasión en 2007 el toro me partió dos vértebras y estuve sin caminar seis meses pero no me dejó secuelas. Hace 10 años un toro me perforó los pulmones, estuve a punto de morir en el Puerto de Santa María en España, pero no me dejó secuelas. Hace dos años un toro me perforó el cuello, la traquea y el peroneo y tampoco me dejó secuelas. Tengo muchos huesos rotos, muchas cornadas pero sin secuelas”.
«Y esta si me va a dejar, por el momento no sabemos cuanto vayan a durar y entonces pues paciencia, mucha paciencia y seguir aprendiendo de la cornada. Estoy agradecido con dios por todo lo que me pasó. Suena a una locura y no lo digo por verme digno o bueno. Me ha enseñado a descubrir mucho de mi mismo y cambiar muchos pilares de mi manera de ser como persona y como torero. Me ha cambiado a ser diferente, como torero me ha ayudado a modificar mi toreo por las limitaciones físicas que tengo, me esta haciendo mejor torero esta cornada”.
“La Plaza México es la más importante en mi carrera, ha sido la columna vertebral de ella. He tenido la gran suerte de salir varias veces a hombros, de su afición, de cortar 22 orejas y un rabo a lo largo de mis 15 años como matador de toros y había que escribir juntos esta historia”, Arturo Macías
-Después de ese percance ¿cómo te sentiste de regresar y hacerlo en la Monumental Plaza México?
«Me siento lleno de vida, con una felicidad plena basada en un agradecimiento a dios por permitirme volver a torear, por permitirme volver a vestirme de torero, por hacer lo que más amo en el mundo, llenarme de pasión y sentir delante de un toro para poder hacer sentir. Todavía hacerlo en la México hizo más interesante la cosa porque lo lógico podría haber sido hacerlo en un pueblo sin importancia, con un toro de otro tamaño y poco a poco ir probándome”.
“Creo que este mundo de valientes y no lo hago por temeridad sino porque me veo capaz y porque quiero sentir, yo no toreo por ego, ni por dinero, ni por una posición social. Toreo porque es lo que mas me gusta hacer y sentir. Y sentir un a reaparición de Madrid a la La México, ¡wow, de ensueño!”.
-¿Cómo calificas tu actividad en el año 2019 y qué esperas en este 2020?
«Ha sido marcado por el percance, corté la temporada en septiembre; tuve otra cornada en Aguascalientes en abril. Quitando esas dos cornadas creo que cerré el año con 12 corridas o 14 y en todas salí a hombros, menos la de Madrid. Leon, Aguascalientes, en todas las plazas donde me presenté en 2019. Fue un buen año para mi, pude cuajar muchos toros y cuajarlos bien. He tenido una evolución conmigo mismo muy buena. Esta cornada vino a reafirmar la evolución que venia buscando y trazando dentro de mi. Por eso te decía al principio que esta cornada para muchos puede parecer una desgracia pero para mi ha sido una bendición”.
2005
Año en que tomó la alternativa en mayo de se año en Aguascalientes