El juicio entre el actor Johnny Depp y su exesposa, la también actriz Amber Heard, llegó hasta Palacio Nacional, en voz del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
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Mientras afirmaba que los expresidentes Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo, Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto no son sus enemigos, sino sus adversarios políticos, López Obrador recordó sus diferencias políticas, entre ellas, la guerra contra el narcotráfico.
Fue en ese momento cuando López Obrador recordó que Genaro García Luna, ex secretario de Seguridad Pública en el gobierno de Calderón, está detenido en Estados Unidos, acusado de vínculos con el narcotráfico; esperando ser juzgado. Y comparó su caso con el de la ex pareja mencionada.
“Todo esto de la guerra contra el narcotráfico era una pantalla, porque tenían un acuerdo. Era algo muy común, combatir un grupo y proteger a los demás, cuando una autoridad tiene que actuar con rectitud”, comentó.
“El Gobierno de Estados Unidos tiene que decidir sobre esto. Acaban de resolver, me llamó la atención, lo de una denuncia muy publicitada de unos esposos divorciados que la señora acusaba maltrato. Y bueno, ya resolvieron los jueces, pero todo el proceso creo que tardó seis meses y lo de García Luna ya lleva años. Está rarísimo. ¿Qué no tienen información? ¿Por qué tanto tiempo?”, comentó López Obrador.
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El presidente añadió que esa es una de sus principales diferencias con Felipe Calderón. “Estoy en contra de él por haber desatado esa guerra y haber autorizado que se llevarán a cabo masacres”. Sin embargo, concluyó diciendo que si se encontrara a todos los ex presidentes, los saludaría.
