La derrota de Va por México, y particularmente el PRI, en el Estado de México (Edomex) redujo las posibilidades de que la oposición pueda ganar las elecciones presidenciales de 2024. Ante las diversas variables que pudieron intervenir en este resultado, miembros de las bancadas del PAN y PRD desencadenaron una serie de críticas que acusaron desde una falta de proyecto hasta una traición por parte del tricolor a la coalición.
Retener el Edomex era decisivo para las próximas elecciones, pues se trata de la entidad con el padrón electoral más abundante, por ello se le llama “la joya de la corona” del PRI, pues el demostrar presencia en dicha entidad garantizaba, al menos, una campaña competente de cara a las elecciones presidenciales; sin embargo, Delfina Gómez, candidata de Morena, rompió la hegemonía del Revolucionario Institucional al convertirse en la primera mujer que dirigirá el Edomex.
Los datos duros
De acuerdo con el Instituto Nacional Electoral (INE), todo el Padrón Electoral de México es de 97 millones 440 mil mexicanos; de ellos, 12 millones 705 mil habitan el Edomex. Dicha entidad cuenta con una participación ciudadana del 49.88% y de ésta, la mayoría favorece a Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
Esto se traduce, de acuerdo con el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) 2023 en 3 millones 270 mil votos para el partido guinda. Además, con la presencia de una mujer morenista y cercana al presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), existe la fuerte posibilidad de que la tendencia que favorece a Morena crezca para las elecciones de 2024.
En cambio, el Padrón Electoral de Coahuila (entidad donde sí ganó el PRI), de acuerdo con el INE, es de 2 millones 355 mil, casi cinco veces menor que el de Edomex. Por lo que esta victoria no influirá tanto en las elecciones de 2024, ello a pesar de que la participación ciudadana fue del 55.91%, pues los 741 mil votos que consiguió Manolo Jiménez, no pueden competir contra los 3 millones de Delfina Gómez.
Fuego amigo en Va por México
Es en este contexto que, al interior de la coalición Va por México, integrada por el PRI, PAN y PRD, surgieron severas críticas a la pérdida de proyecto como alianza opositora, a la dirigencia nacional y a la desatención de la realidad que, aún a pesar del optimismo de Alito Moreno, Marko Cortés y Zambrano, perdieron la entidad que era clave para poder buscar la presidencia.
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Javier Corral, ex gobernador de Chihuahua por el PAN, destacó en sus redes sociales que la ruina del albiazul fue aliarse al PRI. De acuerdo con su lógica, la alianza no ayudó al PRI, sino empobreció a Acción Nacional, por lo que ambos partidos serán “enterrados juntos en una asquerosa némesis necrofílica que jamás hubieran imaginado los panistas de la primera hora”.
Silvano Aureoles, ex gobernador de Michoacán por el PRD, aseguró que Alfredo del Mazo, actual gobernador del Edomex por el PRI, traicionó toda la historia de su entidad, del priismo y su familia. Sin especificar qué es lo que deseaba que el priista hiciera en las elecciones, Aureoles aseguró que Del Mazo pasará a formar parte del “basurero de la historia”.
Felipe Calderón, ex presidente de México por el PAN, sostuvo que la elección en Edomex es premonitoria de las presidenciales, aunque no tiró la toalla y confió en que aún existe la posibilidad de ganarle a Morena en 2024, pero para que ese objetivo se logre, debe de haber un cambio en la forma en que se dirige la coalición: “Que esa nueva militancia ciudadana elija candidatos y dirigentes y movilice a quienes se abstienen y defienda el voto”.
Gustavo Madero, senador sin partido, también señaló que, basado en el resultado del domingo, los líderes de Va por México deben de reconocer que sus estrategias son ineficaces e insuficientes para ganarle a Morena.
Damián Zepeda, senador del PAN, también miró hacia adentro de Va por México y reconoció que el resultado es duro para la oposición. Durante una entrevista a MVS, el panista declaró que no funciona la alianza PRI-PAN (al PRD ni lo mencionó) y señaló la necesidad de hacer un cambio de rumbo: “acabar con la alianza y reconfigurar un proyecto con miras al futuro”.
Por su cuenta, los líderes partidarios se limitaron a felicitar a Alejandra del Moral por acompañarlos durante el periodo de campañas y señalar que “no se van a rendir” y buscarán, sin especificar su estrategia, que ganarle a Morena en las elecciones presidenciales de 2024.
