La llamada austeridad republicana promovida por el presidente López Obrador está en un punto álgido, pues uno de sus decretos para generar ahorros —si no se modifica en San Lázaro— vulnerará la lucha que él mismo emprendió contra la corrupción e impunidad, advirtió Ángeles Estrada, directora ejecutiva de la Iniciativa de Transparencia, Corrupción y Digitalización del Tecnológico de Monterrey (ITAC).
En abril de este año, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) presentó una iniciativa para ajustar 18 dependencias, ello para reducir la burocracia en el Estado mexicano y, al mismo tiempo, seguir satisfaciendo las necesidades que éstas cubren.
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No obstante, la desaparición de la Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional Anticorrupción (SNA), que generaría un ahorro de 136 millones de pesos —de acuerdo con el PPEF 2024—, modificará la forma en la que el gobierno combate la corrupción y la impunidad.
Por un lado, está el discurso del mandatario, quien sostiene que es tarea de la Secretaría de la Función Pública (SFP) hacer los trabajos de combate a la corrupción en México, por lo que tener la Secretaría Ejecutiva del SNA, a su parecer, es una duplicidad de funciones. En consecuencia, promueve su eliminación.
Sin embargo, sí existen diferencias entre las funciones de ambas dependencias, además, el esfuerzo por reducir el gasto público en este rubro representa menos del 10% del costo de la SFP, pues, de acuerdo con el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PPEF) 2024, la dependencia a cargo de Roberto Salcedo solicitó un presupuesto de mil 636 millones de pesos.
Qué es lo que promovió AMLO
A detalle, el jefe de Estado planteó un reordenamiento jerárquico de 18 organismos descentralizados, órganos desconcentrados y unidades administrativas. Cabe destacar que, por su naturaleza constitutiva, los organismos son los más caros, seguidos de los órganos y, hasta el final, las unidades.
La propuesta del presidente consiste en que siete órganos desconcentrados se vuelvan unidades administrativas, un organismo descentralizado se vuelva un órgano desconcentrado, seis organismos descentralizados se vuelvan unidades administrativas y un organismo descentralizado (Secretaría Ejecutiva del SNA) desaparezca.
Asimismo —las menos trascendentes—, se plantea que dos unidades administrativas cambian de dependencia y se elimina la participación del Servicio Geológico Mexicano en el Fideicomiso de Fomento Minero. Pero ¿qué significa todo esto?
Publimetro contactó con la maestra Ángeles Estrada, quien aclaró la diferencia entre organismos, órganos y unidades, donde, además del costo, diferenció la libertad y autonomía con la que operan en relación al Poder Ejecutivo Federal.
Los órganos desconcentrados están subordinados a las secretarías de Estado, por lo que el jefe máximo es el presidente, y ayudan a la realización de fines específicos y, cuando éstos se cumplen, se elimina el objetivo de los órganos.
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En cambio, los organismos descentralizados no dependen jerárquicamente del Ejecutivo y, por tanto, poseen libertad presupuestal, de gestión y patrimonial. Es decir, con la iniciativa de AMLO, además de desaparecer un organismo, siete más perderán diferentes libertades, pues pasan a depender directamente a una secretaría.
Por tanto, entre otras cosas, dejarán de presentar su requerimiento presupuestal a la Cámara de Diputados y éste se les asignará desde la secretaría a la que se les adscribió; lo cual se traduce en que el Ejecutivo Federal incidirá directamente en las actividades que ahora se desempeñan con cierto nivel de autonomía.
“Lo que realmente busca el presidente es tener control sobre los órganos que no tiene control, al menos no control directo”
— Ángeles Estrada
Austeridad republicana y eficiencia del Estado
La maestra del Tecnológico de Monterrey especificó que este tipo de medidas sí hace más barata la administración pública, pues se adelgaza la nómina y se eliminan costos por renta de edificios y pago de servicios; asimismo, no advierte un problema mayor con la desaparición de órganos desconcentrados, toda vez que sus objetivos estén cubiertos.
Sin embargo, en relación a los organismos descentralizados que pasan a ser órganos desconcentrados, unidades administrativas o desaparecen, deben de ser valorados a consciencia en San Lázaro, pues son las comisiones unidas de Transparencia y Anticorrupción y de Gobernación y Población las que analizan dicho documento.
En caso de que la iniciativa de López Obrador sea aprobada sin modificar, además del SNA, se verán trastocados seis institutos y un consejo:
- Instituto Nacional de Pesca y Acuacultura
- Instituto Nacional de Lenguas Indígenas
- Instituto Mexicano de Tecnología del Agua
- Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático
- Instituto Mexicano de la Juventud
- Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores
- Consejo Nacional para el Desarrollo y la Inclusión de las Personas con Discapacidad
Diferencias entre el SNA y la SFP
Finalmente está el tema de las diferencias entre el SNA y la SFP. Por un lado, la Función Pública, es una dependencia subordinada al Ejecutivo Federal dedicada a “procurar que lo público funcione con eficacia y probidad, con un enfoque en la prevención de riesgos y en la gestión para resultados, a fin de que se atiendan los problemas públicos para lograr la satisfacción de la ciudadanía”.
Por el otro lado, está el SNA, que es “el espacio de coordinación entre las autoridades de todos los órdenes de gobierno en la prevención, detección y sanción de faltas administrativas y hechos de corrupción, así como en la fiscalización y control de recursos públicos”.
Su diferencia más evidente es la distancia que guardan del Poder Ejecutivo y la ciudadanía, misma que, en teoría debe de ser complementaria. Pues la Secretaría Ejecutiva del SNA tiene una Comisión Ejecutiva vinculante con el Comité de Participación Ciudadana del Comité Coordinador del SNA —Comité integrado por otras dependencias, entre ellas, la SFP—.
Además, la dependencia que busca desaparecer AMLO se vincula con los sistemas estatales anticorrupción y el Sistema Nacional de Fiscalización. Es decir, si se aprueba el decreto de López Obrador sin modificación alguna, las funciones que realiza la Secretaría Ejecutiva del SNA, pasarían a formar parte de las responsabilidades de la SFP.