MADRID (AP) — Una disputa en torno a la ganadería industrial está causando tensiones en el gobierno de coalición de centroizquierda en España. El ministro de Agricultura señaló el mates que las críticas del titular de Consumo al sector ganadero del país eran “muy desafortunadas».
El ministro de Consumo, Alberto Garzón, dijo en una entrevista al diario británico The Guardian el mes pasado que la ganadería intensiva es “insostenible”, daña el medio ambiente y produce carnes de baja calidad.
“Encuentran una localidad en una parte despoblada de España y ponen 4.000, o 5.000 o 10.000 cabezas de ganado (…) Contaminan el suelo, contaminan el agua y después exportan esta carne de poca calidad de estos animales maltratados», afirmó el ministro.
Garzón pertenece al partido Unidas Podemos, el socio minoritario del Partido Socialista en la coalición que gobierna el país desde hace dos años.
Las declaraciones del ministro desataron una tormenta, con representantes de la industria y partidos de la oposición exigiendo su renuncia.
El titular de Agricultura, Luis Planas, lamentó el martes la polémica en torno a un importante sector de la economía nacional. España es el cuarto exportador de ganado y carne de la Unión Europea, agregó.
En declaraciones a la emisora de radio Onda Cero, apuntó que los ministros suelen consultarse entre sí antes de adoptar una postura sobre asuntos de alcance nacional que se solapan entre sus departamentos pero que Garzón no se puso en contacto con él antes de la entrevista.
El presiente del gobierno, Pedro Sánchez, también se posicionó del lado de los ganaderos, mientras que la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz — el cargo de más relevancia de Unidas Podemos en la coalición —, instó a sus colegas a sopesar sus palabras y a “cuidar” la coalición.