TORONTO (AP) — Los padres de familia en Ontario no serán notificados de un brote de COVID-19 en las escuelas de sus hijos hasta que haya una tasa de ausentismo del 30% entre alumnos y personal, informaron el miércoles las autoridades de la provincia.
El ministro de Educación de Ontario, Stephen Lecce, también dijo que los estudiantes volverán a clases el lunes. El gobierno de la provincia había dicho hace unos días que las clases en línea continuarían al menos hasta el 17 de enero debido a un repunte de infecciones impulsado por la variante ómicron.
Los estudiantes de Ontario, la provincia más grande del país, han pasado más tiempo con la enseñanza a distancia que los alumnos del resto de Canadá y de Estados Unidos.
Los estudiantes y personal de las escuelas de Ontario eventualmente se someterán a dos pruebas rápidas en caso de presentar síntomas de COVID-19, pero no sabrán si un gran número de sus compañeros y colegas están enfermos hasta que se ausente una tercera parte de la escuela.
El director de Salud de la provincia defendió la decisión al indicar que el riesgo de hospitalización entre los niños es muy bajo y mucho menor que con las mutaciones previas del coronavirus. El doctor Kieran Moore dijo que las autoridades darán a conocer la información sobre hospitalizaciones.
El gobierno de la provincia también distribuirá mascarillas N95 a docentes y personal escolar, así como cubrebocas quirúrgicos a los estudiantes.
