MADRID, 14 (EUROPA PRESS)
La Policía de Túnez ha hecho este viernes uso de gases lacrimógenos para dispersar a cientos de manifestantes en la protesta que ha tenido lugar en la capital, Túnez, después de que las personas que han salido a las calles hayan intentado abrirse paso a la fuerza hacia la principal arteria de la ciudad y hayan atacado a los agentes.
El partido islamista Ennahda hizo un llamamiento a una jornada de movilizaciones el jueves ante la «emergente dictadura» encarnada por el presidente, Kais Saied, que en julio suspendió el Parlamento y disolvió el Gobierno para arrogarse todas las competencias. Los manifestantes también conmemoran el undécimo aniversario de la huida del expresidente Zine el Abidine ben Alí, derrocado en 2011 en el marco de la Primavera Árabe.
Las fuerzas de seguridad tunecinas han levantado barreras para impedir el acceso de los manifestantes a la avenida Habib Burguiba, mientras estos han coreado consignas condenando el «uso de la fuerza».
Asimismo, han portado pancartas en las que se podía leer «Constitución, libertad y dignidad nacional», al tiempo que han llamado al presidente «tirano». Por su parte, la Policía les ha instado, a través de megáfonos, a alejarse de los accesos a la principal avenida de Túnez, según ha recogido la prensa tunecina.
Uno de los líderes de Ennahda, Abdelhamid Jelassi, ha denunciado «una nueva expresión de la dictadura ejercida por el presidente» y ha señalado que la situación epidemiológica en el país «es sólo un pretexto para cerrar el camino a los opositores». El Gobierno impuso un toque de queda nocturno a pocos días del aniversario de la salida de Ben Alí.
«Kais Saied es el proyecto de un tirano que se ha vuelto contra las instituciones legítimas del Estado y quiere instalar un régimen basado en el poder absoluto», ha aseverado en declaraciones a la agencia de noticias TAP.
Saied ha sido muy criticado por sus medidas excepcionales, especialmente por parte de Ennahda, que se impuso en las últimas elecciones y contaba con la mayoría en el Parlamento. Así, la formación ha acusado al mandatario de dar un «golpe de Estado».
El mandatario anunció el 13 de diciembre una prórroga de la suspensión del Parlamento hasta que se celebren elecciones, que convocó para el 17 de diciembre de 2022, en el marco de un proceso que incluirá un referéndum constitucional el 25 de julio del año que viene.
La Constitución tunecina de 2014 solo permite suspender el Parlamento durante 30 días, un plazo ampliamente superado, si bien Saied afirmó recientemente que dicha Carta Magna «no tiene legitimidad», lo que ha sido criticado por varios partidos.
