El exmandatario recalca que la oleada de protestas buscaba «destruir la integridad del país»
MADRID, 18 (EUROPA PRESS)
El expresidente de Kazajistán Nursultán Nazarbayev ha asegurado este martes que no ha abandonado el país a raíz de la represión de las protestas a principios de enero y ha negado que existan tensiones con el actual mandatario, Kasim Jomart Tokayev.
En sus primeras declaraciones oficiales tras los disturbios, que se saldaron con más de 200 muertos, Nazarbayev ha manifestado que estos sucesos «sacudieron a todo el país» y ha denunciado que el objetivo era «destruir la integridad del país».
«Estos acontecimientos demuestran una vez más que la independencia debe ser cuidada como un frágil buque que necesita especiales atenciones», ha dicho, antes de agregar que «la tragedia que tuvo lugar es una lección para todos», según ha recogido el portal kazajo de noticias Khabar 24.
Nazarbayev ha subrayado que «es importante encontrar a los que organizaron todos estos pogromos y asesinatos» y ha trasladado sus condolencias a los familiares de las víctimas.
El expresidente ha recordado que en 2019 «transfirió los poderes a Tokayev y que desde entonces ha sido «un pensionista». «Ahora estoy en un merecido retiro en la capital de Kazajistán y no he ido a ninguna parte», ha recalcado Nazarbayev.
«Tokayev tiene todos los poderes. Es presidente del Consejo de Seguridad. Pronto será elegido presidente del Partido Nur Otan. No hay conflicto o confrontación entre las élites. Los rumores sobre este asunto son totalmente infundados», ha argüido.
«Todo el mundo sabe que durante 30 años trabajé incansablemente en beneficio de nuestra patria. Fortalecimos sus fronteras. Llevamos a cabo reformas progresivas. Juntos construimos un Kazajistán independiente y logramos grandes logros en el desarrollo social y económico», ha defendido.
En este sentido, Nazarbayev ha incidido en que todo ello «fue resultado de la solidaridad y la unidad de todos los kazajos». «La estabilidad y la tranquilidad en el país siempre ha sido mi objetivo. Tenemos que cuidar estos valores duraderos», ha reiterado.
«Superaremos la crisis y seremos aún más fuertes. El presidente ha presentado un nuevo programa de reformas destinado a mejorar el bienestar de la gente. Este programa debe ser apoyado», ha recalcado Nazarbayev, quien ha terminado su discurso deseando «salud y prosperidad» a la población.
Las declaraciones del exmandatario han llegado un día después de que Tokayev cesara a varios familiares de Nazarbayev a raíz de las protestas, que se saldaron además con miles de detenidos, en medio de sus esfuerzos por abordar las exigencias de los manifestantes.
Las autoridades kazajas han señalado recientemente que la situación se ha estabilizado, mientras las detenciones continúan y los organismos internacionales cuestionan las cifras ofrecidas por el Gobierno sobre lo sucedido durante la primera semana de enero, cuando miles de personas salieron a las principales calles del país para protestar por el repentino aumento del precio del gas.