UNICEF solicita a la comunidad internacional 107,8 millones de euros para responder de manera urgente a la crisis
MADRID, 9 (EUROPA PRESS)
El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha denunciado este martes que unos 5,5 millones de niños menores de cinco años sufren malnutrición «aguda» en el Cuerno de África debido a la crisis por una severa sequía, los conflictos y la pandemia de COVID-19.
«La situación de los niños y las familias en el Cuerno de África es grave. Están desesperados. Millones de vidas penden de un hilo», ha asegurado el director regional de UNICEF para África Oriental y Meridional, Mohamed M. Fall, en una conferencia de prensa en el Palacio de las Naciones de Ginebra.
A su juicio, «las necesidades son masivas y urgentes, y están superando rápidamente los fondos disponibles para responder. Tenemos que actuar ahora para evitar una catástrofe».
Según las informaciones recogidas por UNICEF, hasta 20 millones de personas en Eritrea, Etiopía, Kenia y Somalia necesitarán agua y asistencia alimentaria en los próximos seis meses. Es decir, casi la misma cantidad de personas que las poblaciones de Grecia y Suecia juntas.
La agencia de Naciones Unidas ha alertado que muchos de ellos son niños que corren un riesgo aún mayor debido a una de las peores emergencias inducidas por el clima de los últimos 40 años. La región no puede hacer frente a otra catástrofe, que combina la COVID-19, los conflictos y el cambio climático.
«Son los niños los que están pagando el precio más alto por unas crisis que no han creado», ha lamentado M. Fall.
UNICEF ha señalado que tres estaciones secas consecutivas han llevado a una grave escasez de agua, matando ganado y cultivos, desplazando poblaciones y aumentando el riesgo de enfermedades y desnutrición severa.
Esta emergencia está privando a los niños de tener un hogar, una comida, un aula y acceso a servicios de salud que salvan vidas.
Asimismo, de estos 5,5 millones de niños que en estos cuatro países están amenazados por la desnutrición aguda, se estima que 1,4 millones sufren desnutrición aguda grave. UNICEF teme que este número aumente en un 50 por ciento si las lluvias no llegan en los próximos tres meses.
En Somalia, se estima que 1,3 millones de niños menores de 5 años están en riesgo de desnutrición, incluidos alrededor de 295.000 casos graves. Se espera que estas cifras empeoren.
UNICEF ha alertado de que las familias están tomando medidas extremas para sobrevivir y, en muchos casos, abandonando sus hogares, lo que pone a los niños en riesgo.
CONSECUENCIAS DE LA CRISIS CLIMÁTICA EN ÁFRICA
Es por ello que, desde UNICEF, han solicitado a la comunidad internacional 123 millones de dólares (107,8 millones de euros) con el fin de responder de manera urgente a las necesidades de estos cuatro países hasta finales de junio de 2022 y evitar así, un desastre para los niños y sus familias.
«Además de la sequía y la escasez de agua en el Cuerno de África, me gustaría hablar brevemente sobre el creciente número de niños que sufre las peores consecuencias de las crisis relacionadas con el clima», ha señalado Mohamed M. Fall.
También ha mencionado al ciclón Batsirai que ha desplazado a más de 70.000 personas en Madagascar, destruyendo cientos de escuelas y centros de salud, y dañando carreteras.
«Antes de eso, la tormenta tropical Ana ya había causado estragos en partes de Madagascar, Mozambique, Zimbabue y Malaui, dejando nuevamente la necesidad de asistencia humanitaria inmediata», ha agregado M. Fall.
La organización ha reclamado una «respuesta colectiva» que garantice el acceso a agua potable, nutrición y espacios seguros para los niños. UNICEF ha explicado que, junto a sus aliados, ha ayudado a evitar situaciones anteriores de hambruna en la región antes y «podemos, y debemos, hacerlo de nuevo».