Los arrestos llegan en medio del aumento de la represión tras el golpe de Estado de octubre de 2021
MADRID, 10 (EUROPA PRESS)
Las autoridades de Sudán han detenido a un antiguo ministro y otros altos cargos de la coalición civil Fuerzas para la Libertad y el Cambio (FFC), en el marco del aumento de la represión política desde el golpe de Estado de octubre, encabezado por el jefe del Ejército y presidente del Consejo Soberano de Transición, Abdelfatá al Burhan.
Según el portal sudanés de noticias Sudan Tribune, los detenidos son el exministro de Asuntos de Gobierno Jalid Omer Yusef y los antiguos miembros del Comité para la Eliminación del Empoderamiento Uagdi Salí y Al Tayeb Osman Yusef.
Salí ha resaltado a través de su cuenta en la red social Twitter que había sido trasladado a la prisión de Suba y acusado de malversación y «violación de la confianza» por parte de las autoridades militares sudanesas.
El Comité para la Eliminación del Empoderamiento, disuelto por Al Burhan tras la asonada, era un organismo de transición creado para confiscar propiedades de personas cercanas al régimen de Omar Hasán al Bashir, derrocado en abril de 2019.
Asimismo, se da la circunstancia de que tanto Salí como Osman Yusef fueron parte de una delegación de la FFC que se reunió el martes con el jefe de la Misión Integrada de Asistencia para la Transición de Naciones Unidas en Sudán (UNITAMS), Volker Peters, en el marco del proceso de consultas abierto para intentar solucionar la crisis.
Las detenciones han sido criticadas desde las FFC, apartadas de las autoridades de transición por Al Burhan tras el golpe de Estado, así como por el Partido Nacional de la UMMA y por el antiguo líder rebelde Yasir Arman, uno de los firmantes del histórico acuerdo de paz de octubre de 2020.
Además, se enmarcan en un contexto de movilizaciones para denunciar la asonada, la última de las cuales tuvo lugar el lunes, cuando cerca de 200 personas resultaron heridas a causa de la represión por parte de las fuerzas de seguridad y grupos paramilitares.
Al Burhan resaltó la semana pasada que sólo entregará el poder a un gobierno electo o a una autoridad surgida de un «consenso nacional», tras anunciar en enero la composición de un gobierno interino tras la dimisión a principios de enero del primer ministro, Abdalá Hamdok, en protesta por la represión de las manifestaciones.
Hamdok, detenido tras la asonada, volvió al cargo en noviembre tras un acuerdo firmado con Al Burhan en medio de las presiones internacionales. El pacto fue rechazado por parte de sus socios civiles, que denunciaron que suponía dar legitimidad a la asonada, si bien finalmente abandonó el cargo.
Las autoridades de transición fueron instauradas tras un acuerdo entre la junta militar anterior, surgida tras el golpe de Estado de 2019 contra Omar Hasán al Bashir, y diversas organizaciones civiles y formaciones políticas opositoras. Este Gobierno había iniciado una batería de reformas sociales y económicas y ha alcanzado un acuerdo de paz con importantes grupos rebeldes de Darfur y otras zonas del país.
