MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
La Sociedad Española de Nefrología (S.E.N.), la Sociedad Española de Enfermería Nefrológica (SEDEN) y ALCER han reiterado la necesidad de implantar un Plan de Salud Renal Nacional que consiga frenar el aumento de la enfermedad renal potenciando el diagnóstico temprano y la cultura de la prevención, así como fomentar los tratamientos domiciliarios para mejorar la calidad de vida de los pacientes.
Así lo ha asegurado la presidenta de la S.E.N, Patricia de Sequera, en la inauguración de la jornada ‘La Enfermedad Renal en España’, con motivo del Día Mundial del Riñón (10 de marzo), que ha tenido lugar este lunes en el Congreso de los Diputados y que ha contado con la participación de la vicepresidenta segunda del Congreso de los Diputados, Ana Pastor; el presidente de ALCER, Daniel Gallego; el presidente de la SEDEN, Juan Francisco Pulido; y la ministra de Sanidad, Carolina Darias, que ha participado a través de un vídeo.
El objetivo de esta jornada ha sido poner de manifiesto que la enfermedad renal crónica (ERC) es una «epidemia silenciosa», tal y como demuestran los datos de las últimas décadas, que indican su crecimiento notable, a la vez que ha aumentado su mortalidad, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Según la ministra Darias, la ERC ha pasado de ser una enfermedad infrecuente y grave, a ser una enfermedad cada vez más extendida y de gravedad variable, por lo que ha defendido la necesidad de implementar la respuesta a la patología a través de un refuerzo de las capacidades del Sistema Nacional de Salud (SNS). «Un reto complejo que debe ser abordado desde diferentes prismas y respondido desde la salud pública, de forma transversal y multidisciplinar», ha subrayado.
En este sentido, ha explicado que España cuenta con el Marco Estratégico de Atención a la Cronicidad, que se trata de una herramienta que plantea las acciones necesarias para llevar a cabo una atención centrada en el paciente crónico, que asegure la continuidad asistencial, y que fomente una atención interdisciplinar experta y personalizada.
Una de las principales líneas de trabajo que ha destacado Carolina Darias es la investigación en este ámbito y ha resaltado la labor desarrollada por el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), que ha destinado 25,6 millones de euros a proyectos sobre enfermedad renal y otros 15,7 a proyectos de la Red de la Patología Renal.
Por su parte, Patricia de Sequera ha señalado que el crecimiento que experimenta la ERC se debe al gran desconocimiento que reina en la sociedad, por lo que la S.E.N. ha definido el diagnóstico precoz y la prevención como sus grandes objetivos, a la vez que son los «déficits» del SNS. En el caso de la detección temprana, ha elogiado el plan pre-colon de la Comunidad de Madrid, que consiste en recoger muestras de heces de la población mayor de 50 años para cribar el cáncer de colon mediante la detección de sangre aunque ha añadido que se podría contemplan también la muestra de orina.
Asimismo, la presidenta ha sostenido que es necesario mejorar el tratamiento renal sustitutivo con diálisis puesto que «permite seguir viviendo a los pacientes pero no es suficiente». Por ello, ha afirmado que se debe avanzar en los tratamientos domiciliarios de la enfermedad renal, tanto de la diálisis peritoneal como de la hemodiálisis domiciliaria, para lograr que el porcentaje de aplicación y uso de este tipo de técnicas crezca y se consolide como una opción con grandes beneficios, no solo para el paciente, también para la sostenibilidad del sistema sanitario.
«Las técnicas domiciliarias son más flexibles, requieren menos inversión de infraestructura inicial, menos presencia hospitalaria y menos personal sanitario, entre otras muchas ventajas. Yo creo que solo evitar el contacto con un ambiente hospitalario y dar mayor autonomía a los pacientes ya parecen razones suficientes para considerar estas técnicas como las de primera elección», ha detallado.
EL COSTE DE LA LUZ, PRINCIPAL INCONVENIENTE PARA LA DIÁLISIS
Juan Francisco Pulido también ha defendido el tratamiento renal domiciliario y ha asegurado que «cuanto antes comience el control y educación, antes se logrará mejorar los indicadores de salud», lo que a su vez, ayudará a reducir costes sanitarios para el SNS. Para mejorar la diálisis asistida, ha propuesto la creación de una red de personal que ayude a hacer los tratamientos o, directamente a administrarlos en los domicilios específicos para ellos o en la residencia de mayores.
Sin embargo, ha lamentado que el crecimiento de la luz ha desembocado en que algunos pacientes hayan tenido que rechazar este tratamiento por motivos económicos. «Pedimos ayuda para todas las personas que no pueden soportar esta carga y necesitan seguir su tratamiento y, por tanto, su vida», ha manifestado.
Al respecto, la S.E.N. ha reclamado a la Administración que se encargue de abonar estos costes y ha mantenido que las medidas deben ser homogéneas y coordinadas a nivel nacional para evitar la inequidad. «Les pido que sean sensibles a esta situación y nos ayuden a solucionar esta necesidad y esta inequidad. El empoderamiento y la atención centrada en el paciente son elementos clave para mejorar los resultados en salud, al igual que aumentar la satisfacción de las personas que viven con enfermedad renal y optimizar el uso de los recursos sanitarios», ha declarado Patricia de Sequera.
PLAN NACIONAL DE PREVENCIÓN
Durante su intervención, Pulido ha sugerido la creación de un Plan Nacional de Prevención, que cuente con la ayuda de las sociedades científicas. «Al igual que existen otros planes para otras enfermedades que no afectan a tanta población, pero que son más llamativos por su sintomatología. La enfermedad renal es silente. No notamos nada hasta que la tenemos instaurada y ya no hay marcha atrás. Por eso es tan importante detectarla pronto», ha apuntado.
Posteriormente, Daniel Gallego ha añadido que también se debe crear programas educativos en los colegios, universidades, residencias de mayores, centros de día, etc, para concienciar y aumentar el conocimiento de la enfermedad renal.
La ERC afecta en España a más de siete millones de personas (contando familiares y cuidadores) y Gallego ha reparado en los impactos que tiene en la sociedad, principalmente en el laboral, ante lo que ha pedido una atención integral al paciente que recoja, además, aspectos clínicos, sociales, nutricionales y de salud mental.
«Como sociedad tenemos que ser capaces de reintegrar a estas personas en el ámbito laboral, pues a España no le sobra en absoluto población activa, por ello, necesitamos un plan estratégico que promocione y fomente las técnicas domiciliarias, que creemos firmemente que la cronicidad debe ser manejada en entorno domiciliario, siempre que sea posible, el hogar y la familia son elementos terapéuticos en sí mismos», ha detallado.
La jornada de inauguración ha concluido con la intervención de Ana Pastor, quien ha reconocido la necesidad de implantar una nueva estrategia de enfermedad renal, que incluya indicadores de educación sanitaria, de vida de los pacientes y del proceso asistencial. De hecho, ha mencionado la importancia en esta patología de la humanización, algo que, a su juicio, se está perdiendo al incorporar máquinas para los tratamientos.
«La enfermedad renal crónica está asociada a otras patologías de alta prevalencia y que, por tanto, los pacientes son pacientes en muchos casos pluripatológicos. Estamos perdiendo en humanización del sistema sanitario incorporamos muchas máquinas, pero a veces nos olvidamos que detrás de esa máquina hay un paciente y cada paciente, ahora que se habla tanto de la medicina. A veces se nos olvida que el paciente es uno y por tanto eso es lo que hay que tratar», ha asegurado.