MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
La ONG Human Rights Watch (HRW) ha denunciado este miércoles la desaparición desde octubre de 2021, hace ya seis meses, de Alia Azizi, directora de una cárcel para mujeres en la capital de Afganistán, Kabul.
La organización ha trasladado su temor ante la posibilidad de que Azizi haya sido objeto de desaparición forzada, pues había sido funcionaria del gobierno anterior al ascenso de los talibán en agosto de 2021, si bien es cierto que tras esta fecha regresó a su puesto de trabajo.
En este punto, la investigadora de HRW sobre Afganistán, Fereshta Abbasi, ha instado a las autoridades del país a que investiguen con rapidez y credibilidad la desaparición de Azizi y la devuelvan a la libertad.
«El derecho internacional obliga a las autoridades a investigar las aparentes desapariciones forzadas, enjuiciar a los responsables de las violaciones e informar a la familia de la persona sobre su paradero», ha recordado Abbasi.
Azizi se había desempeñado como oficial de la Policía durante 17 años y desde 2019 ocupó la Dirección de la prisión de mujeres de la capital. Con la toma del poder por parte de los talibán abandonó su puesto de trabajo durante unas dos semanas, periodo en el que permaneció en su domicilio.
Más tarde, una llamada de líder talibán de la prisión central de Herat facilitó el regreso de Azizi a su empleo. «Necesitamos que vuelvas a trabajar», señaló el jefe talibán, según recoge HRW.
La organización ha subrayado que la familia de Azizi ha pedido ayuda tanto a la Oficina del gobernador de Herat, como a la Comisaría de Policía y al jefe de la prisión de Herat para poder dar con su paradero, a la par que ha solicitado a las autoridades de Herat que investiguen su desaparición aunque sin éxito pues consideran que se trata de un asunto familiar.
HRW ha incidido en que el caso de Azizi se puede considerar como una desaparición forzada pues, según la definición del término, se trata de aquellas desapariciones en las que los funcionarios del Estado se niegan a revelar el paradero del apresado.
Según el organismo, en esta ocasión se pone de manifiesto que las autoridades talibán no investigan graves denuncias de violaciones de Derechos Humanos, incluidas las que afectan a los exfuncionarios del anterior gobierno.
«Las desapariciones forzadas son un crimen atroz que persistirá en Afganistán a menos que las autoridades talibán se tomen en serio el fin de esta cruel práctica y lleven a los responsables ante la justicia», ha zanjado Abbasi.
