Los precios en la Bolsa de Valores de Nueva York siguen a la baja tras seis semanas de caída en el mercado, lo que ha ocasionado preocupación por las afectaciones que pueda causar a las empresas.
En lo que va del 2022, el Nasdaq registra una caída de 27%; S&P 500, 17%, y el Dow Jones, 13%; considerándose uno de los peores comienzos de año desde la crisis de 1929.
Al cierre, los índices de Wall Street reportaron las bajas más pronunciadas en dos años, el tecnológico Nasdaq bajó un 4.7%, el S&P 500, un 4%, y el Dow Jones de Industriales, un 3.6%.
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Mientras las tecnologías bajaban, se iba contrarrestando la ganancia en otros sectores. El fabricante de chips Nvidia perdía 1.1% y las compañías tecnológicas, incidían mucho en la dirección del mercado por su gran tamaño.
Gracias a que los inversionistas se preocupaban por la inflación y las altas tasas de interés, el sector se convirtió en un peso para la bolsa. Las cadenas minoristas también bajaron; Amazon cedía 1.3% y Starbucks disminuyó 2.9%.
Al mismo tiempo, las empresas del sector energético y de salud reflejaban un alza sólida; Chevron aumentaba 2.7% y Eli Lilly avanzaba 3.6%.
Spirit Airlines aumentó 12.4% tras la propuesta de compra que lanzó JetBlue. El Tesoro de Estados Unidos sufrió un descenso de 2.94 a 2.89% de rendimiento de sus bonos.
ManTech, empresa de defensa, incrementó en 14.9% tras el intento de compra de la firma de inversiones Carlyle Group.
El crudo estadounidense se elevó en 1.6% y en lo que va de año registra un alza acumulada de más de 50%. Los precios del gas natural aumentaron 1.5% y han duplicado sus resultados en lo que va de 2022.
¿Por qué se desploma Wall Street?
Los agentes bursátiles se anticiparon a una desaceleración económica y restricciones de crédito por un alza de las tasas para controlar la inflación.
Los precios suben rápidamente en todo el mundo, lo que obliga a los bancos centrales a subir las tasas de interés aunque eso genere un posible impacto en el PIB.
A esto se sumaron otros problemas como el alza del 9 % en los precios al consumidor en Reino Unido y la escalada similar que sufrió Canadá.
El informe del Departamento de Comercio de Estados Unidos, informó que Estados Unidos registra una inflación anual de 8.3% —en máximos desde 1982, al igual que la inflación británica— gracias al aumento de facturas de energía, y el alza de precios en Canadá subieron un 6.8% el mes pasado, en gran parte por el alza de los precios de los alimentos y la vivienda, según datos de Statistics Canada.
A estos problemas que desencadenaron por la inflación se sumaron los resultados de Target Corporation, que reportaron ganancias trimestrales que reflejaban una reducción de la mitad del precio normal, lo que ocasionó un aumento de los costos de combustible y fletes.
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Por esta razón, las acciones de Target se desplomaron 24.9%, y un día después Walmart alertó que iba a tener las mismas dificultades en sus márgenes de utilidad.
La familia Walton se tambaleó económicamente, desplomando su fortuna casi 19 mil millones de dólares después de que Walmart Inc. realizó el recorte de pronóstico de ganancias. Se considera la peor caída en un solo día de la fortuna familiar desde 1987.
No cualquier analista está dispuesto a predecir aún el fin de la ola de ventas tras unos fuertes primeros cinco meses de 2022 para los activos de riesgo, tomando en cuenta la gran incertidumbre que vive el mundo en términos macroeconómicos.
