La colombiana dirige a la OSCyL en el estreno nacional de ‘Antología de Zoología Fantástica’, basada en los ‘Seres imaginarios’ de Borges
VALLADOLID, 19 (EUROPA PRESS)
La directora colombiana Lina González Granados sostiene que España se encuentra «un poco a la delantera de Europa» en cuanto a la incorporación de mujeres al frente de orquestas y ha defendido que el panorama en este país «es particularmente muy bueno» en comparación con otros.
La que fuera primera colombiana en ponerse al frente de la Filarmónica de Nueva York subraya que la situación de las mujeres como directoras «depende mucho del país» y no es posible hacer una radiografía «tan global», puesto que «no es algo monolítico».
«En Estados Unidos incluso se mueve de forma diferente en función del estado», reconoce González Granados, quien este fin de semana dirigirá a la Orquesta Sinfónica de Castilla y León (OSCyL) en el que será el estreno en España de la ‘Antología de Zoología Fantástica’, del estadounidense Mason Bates, y que está basada en el ‘Libro de los seres imaginarios’, de Jorge Luis Borges.
En una entrevista concedida a Europa Press, Lina González reconoce que América Latina va «un poco más atrás» en la incorporación femenina a la dirección de orquestas, pero destaca el crecimiento que las directoras latinoamericanas están logrando en Estados Unidos, como la mexicana Alondra de la Parra, reconocida «también en Europa», o ella misma, quien durante los próximos tres años se desempeñará como directora residente en la Ópera de Los Ángeles.
Aunque admite que en general todavía hay «muy pocas en escenarios grandes», subraya la importancia de estos cambios frente al panorama anterior en el que los directores «eran sólo hombres». «Ahorita está creciendo mucho ese movimiento», ha subrayado la directora colombiana, quien apuesta por un cambio y una variedad «sistémica» más que por hechos simbólicos como pudiera ser ver a una mujer al frente de la Filarmónica de Viena en el Concierto de Año Nuevo.
«No va a ser el cambio mayor, el trabajo paulatino marca la diferencia. Las instituciones van cambiando, Viena es un sitio que avanza de manera distinta, la preservación de su repertorio trae otro tipo de estereotipos», explica González Granados, quien no obstante reivindica «grandes avances» como el de la ucraniana Oksana Lyniv, primera mujer en abrir como directora el festival wagneriano de Bayreuth (Alemania).
La directora colombiana reivindica España no sólo en materia de oportunidades para las directoras en el conjunto de Europa, sino también a nivel cultural. «Siempre hay mucho respeto», subraya González Granados, quien se declara «muy contenta» de estar en Valladolid para dirigir el programa número once del abono de temporada para el primer semestre del año de la OSCyL.
DIFERENCIAS ENTRE PAÍSES
En este sentido, enfatiza las diferencias entre países y entre públicos a la hora de plantear repertorios sinfónicos que se salgan de las tendencias más clásicas, sobre lo cual ha puesto también como ejemplo la respuesta «grandísima» recibida en Noruega y Finlandia durante una gira «sólo con música latina», algo que vivió «con agrado», pero también «con algo de sorpresa».
«Depende de a lo que esté acostumbrado el público, hay un pequeño momento que el oído tiene que acostumbrarse», explica la directora, quien aboga por buscar ese nexo que permita la conexión. «La gente sólo necesita tener un punto de partida», precisa, para señalar a continuación cómo la obra de Bates que se estrenará en el Centro Cultural Miguel Delibes, es «muy explosiva» y, aunque se base en un libro de un escritor argentino, remite a elementos de la mitología clásica como unicornios, minotauros, grifos, sirenas o ninfas.
«Siempre trato de programar estas obras en un contexto algo más universal», recalca Lina González Granados, quien enfatiza su conexión «muy cercana» con la obra de Bates, cuyo estreno mundial interpretó la Sinfónica de Chicago con Riccardo Muti a la batuta, a quien la colombiana señala como su «mentor» en esa orquesta.
Una conexión que, también por influencia del conductor napolitano, González siente con todos los grandes compositores de ópera italianos, como Giuseppe Verdi, cuya obertura de ‘La fuerza del destino’ forma parte del repertorio en el que la OSCyL interpretará el estreno de Bates.
A estas piezas se sumará en el programa que la Sinfónica de Castilla y León ofrecerá este viernes, 20 de mayo, y el sábado 21 –ambos días a las 19.30 horas en la Sala Sinfónica ‘Jesús López Cobos’–, el ‘Concierto para violonchelo en mi bemol mayor, op. 107’, de Shostakóvich, hacia quien ella siente «mucha afinidad».
STEVEN ISSERLIS
Para esta última pieza, la OSCyL contará como solista con el violonchelista británico Steven Isserlis, quien sustituye al noruego Truls Mork, previsto inicialmente para este concierto. Será la primera vez en que González e Isserlis coincidan sobre el escenario, si bien el londinense ya ha participado otras dos veces con la OSCyL, la última en noviembre de 2014.
Considerada una de las batutas internacionales del momento, Lina González ha destacado por sus interpretaciones y de repertorio, así como su dedicación a destacar obras nuevas y desconocidas de compositores latinoamericanos, lo que la ha valido reconocimientos como la Medalla de Excelencia Esfinge 2021 y el Premio a la Carrera de la Fundación Solti.
Fue ganadora del IV Concurso Internacional de Dirección de la Orquesta Sinfónica de Chicago ‘Sir Georg Solti’ y ésta será la primera vez que González dirija a la Orquesta Sinfónica de Castilla y León.