Lapid dice que «se arreglará lo que haya que arreglar» y recalca que «cambiar la historia no es una tarea fácil»
MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
El ministro de Exteriores de Israel, Yair Lapid, ha defendido este viernes la viabilidad del Gobierno a pesar de que ha perdido su mayoría parlamentaria tras la retirada de apoyos de dos diputadas durante las últimas semanas y ha manifestado que este Ejecutivo «es lo correcto para el Estado y el pueblo de Israel».
«Dijeron que no recibiríamos el mandato para formar Gobierno. Lo hicimos. Dijeron que nunca se lograría un Gobierno. Lo hicimos. Dijeron que no superaría el primer mes. Lo hicimos. Dijeron que no podría aprobar unos Presupuestos. Lo hicimos. Dijeron que no llegaríamos a la sesión de verano. Lo hicimos», ha resaltado.
«Dijeron que no nos recuperaríamos de la retirada de (la parlamentaria Idit) Silman. Lo hicimos. Ahora esas mismas personas dicen que todo ha terminado. No ha terminado. Seguimos aquí», ha subrayado Lapid, uno de los principales responsables del acuerdo de coalición con el primer ministro, Naftali Bennett.
Así, el también primer ministro rotatorio ha subrayado en un mensaje publicado en su cuenta en la red social Facebook que el Gobierno «no tiene intención de dar a ‘Bibi’ –apodo del ex primer ministro israelí Benjamin Netanyahu– y (al parlamentario ultranacionalista Itamar) Ben Gvir la oportunidad de destruir el país».
«Haremos lo que hacemos cada vez. Nos sentaremos con los que tenemos que sentarnos, arreglaremos lo que haya que arreglar», ha reseñado, antes de reconocer ante sus compañeros de coalición que «a veces es duro». «Se supone que tiene que ser duro. Cambiar la historia no es una tarea fácil», ha argumentado.
«Hacemos algo que es más grande que todos nosotros. Salvar al Estado de Israel y nuestra democracia. Hay grandes fuerzas, y fuerzas oscuras, que nos combate. Hasta ahora las hemos derrotado, contra todo pronóstico, porque hemos tenido decisión y hemos trabajado juntos. Eso lo que haremos también en el futuro. Sólo juntos ganaremos», ha remachado.
El mensaje ha sido publicado un día después de que la parlamentaria Rinauie Zoabi, del partido izquierdista Meretz, anunciara su salida de la coalición de gobierno en Israel, dejándola con 59 de los 120 escaños del Parlamento. El Ejecutivo fue creado el año pasado con una escueta mayoría de 61 escaños.
Zoabi indicó en una carta enviada a Bennett y Lapid, que su decisión está motivada por lo que describe como un giro a la derecha por parte del Gobierno, antes de apuntar concretamente a las demoliciones de viviendas palestinas construidas sin permiso y a una ley que prohíbe a los palestinos casados con israelíes de contar con residencia permanente en Israel.
Asimismo, subrayó que lo sucedido durante el último mes es «intolerable», en referencia a los enfrentamientos en la Explanada de las Mezquitas y la muerte de la periodista Shirín abu Aklé tras recibir un disparo en la cabeza durante una operación de las fuerzas israelíes en la ciudad Cisjordana de Yenín. «Ya no más. No puedo seguir apoyando la existencia de una coalición que acosa a los árabes de esta forma desgraciada», apostilló.
El actual Gobierno asumió el poder en junio tras 12 años consecutivos de Netanyahu como primer ministro de Israel. La coalición, no obstante, está formada por ocho partidos que abarcan todo el espectro político después de un histórico acuerdo para evitar unas nuevas elecciones, después de que tuvieran que celebrarse cuatro comicios en dos años ante la incapacidad de formar mayorías.
IMPUTADA UNA ULTRADERECHISTA POR AMENAZAS
Por otra parte, durante la jornada ha sido imputada la ultraderechista Ilana Sporta Hania por enviar cartas amenazantes con balas al primer ministro y su familia. La mujer, una enfermera jubilada de 65 años, envió estas misivas a Bennett, su esposa y su hijo adolescente amenazando su seguridad si no abandonaba el cargo.
«Esta es la bala que te alcanzará y neutralizará a Gilar la delincuente o a Naftali Bennett el delincuente. Te recomiendo que dimitas», dijo la mujer en la primera de las cartas, dirigida al primer ministro y a su esposa, Gilat Bennett, según ha recogido el diario ‘The Times of Israel’.
Dos días después de esta primera carta, enviada el 25 de abril, llegó otra misiva enviada a Yoni Bennett, el hijo de 15 años de la pareja. La carta fue entregada en la vivienda familiar en Ranana y contenía un mensaje: «Esta es la bala que golpeará tu bajo vientre, Naftali Bennett, y a Yoni Bennett si no dimites».
La Fiscalía ha reclamado que la mujer, Ilana Sporta Hania, permanezca arrestada mientras continúan las investigaciones, mientras que ella ha rechazado los cargos. Los investigadores han determinado que la letra de las cartas coincide con su escritura, si bien por ahora se desconoce el origen de las balas.
Durante la semana pasada salió a la luz el apoyo de la mujer al Likud y a Netanyahu, así como que fue investigada en el pasado por amenazar a políticos con los que está en desacuerdo. Así, tildó a Bennett en redes sociales de «asesino» y «traidor», mientras que en septiembre fue grabada pidiendo al parlamentario de Nueva Esperanza Benny Begin que se ahogue en el océano.
Hania subrayó además que Lapid «realiza más kilómetros que la ‘caja negra’ de un avión, pero cuándo volverá sólo la ‘caja negra'». Asimismo, dijo que el ministro de Seguridad Pública, Omer Barlev, debía «beber agua del Kishon», un río intoxicado, y afirmó que la ministra de Transportes, Merav Michaeli, viste botas «como las que llevaban los nazis en los campos de concentración».
Por su parte, Netanyahu ha condenado las amenazas vertidas por la mujer y ha dicho a través de su cuenta en Telegram que está en contra de «todos los tipos de violencia contra el primer ministro y cualquier otra persona», antes de adelantar que, de ser condenada, será expulsada del Likud.