MADRID, 9 (EUROPA PRESS)
Según ha apuntado la embajadora británica, Melanie Hookins, Londres es consciente de los "desafíos logísticos" que supone para la búsqueda la "ubicación remota" en la que han desaparecido ambas personas, pero ha incidido en la importancia de localizarlos.
"Estamos profundamente preocupados porque el periodista británico Dominic Phillips y el indigenista Bruno Pereira aún no hayan sido encontrados. Somos conscientes de que este sigue siendo un momento angustioso para sus familiares y amigos", ha señalado Hopkins en una publicación en sus redes sociales.
A través de esta misma vía, la embajadora británica ha informado de que el Gobierno británico está prestando "apoyo consular" a la familia de Phillips y que se mantiene "en estrecho contacto" con las autoridades brasileñas.
Esta misma petición la ha lanzado también este jueves Amnistía Internacional (AI), que ha instado a las autoridades brasileñas a "no perder ni un segundo más" en la búsqueda de los desaparecidos después de que se les perdiera el rastro hace ya cuatro días.
"Instamos al presidente Bolsonaro a desplegar todos los recursos disponibles para encontrarlos con vida. Cada segundo podría resultar crucial para traerlos de vuelta a salvo con sus seres queridos", ha señalado en un comunicado la directora de AI para las Américas, Guevara Rosas.
Además, Rosas ha extendido esta petición también a las autoridades de Perú y Colombia para que "desplieguen urgentemente sus equipos de búsqueda y rescate" en sus respectivas regiones amazónicas colindantes con la zona donde se estima que desaparecieran Phillips y Pereira.
"La cooperación internacional es más vital que nunca en situaciones de crisis como esta", ha zanjado la representante de Amnistía Internacional.
Phillips, antiguo colaborador en 'The Guardian' y 'The Washington Post', y Pereira, de la Fundación Nacional del Indio (FUNAI) desaparecieron este fin de semana en el Valle del Javari, en el Amazonas, una región más grande que Austria y hogar de la mayor concentración mundial de tribus no contactadas.
De hecho, la reconocida peligrosidad de la zona ha sido el principal argumento empleado por el presidente del país, Jair Bolsonaro, para cuestionar la expedición. "Solo dos personas en un bote en una región completamente salvaje es una aventura que no se recomienda hacer. Puede pasar cualquier cosa. Puede ser un accidente, puede ser que les ejecuten", dijo Bolsonaro.