MADRID, 8 (EUROPA PRESS)
"Cualquier novelista trata de evocar las emociones del momento. La tensión, las dudas o el miedo al futuro que hay por ejemplo con la invasión a Ucrania son las mismas que había en la Guerra de Independencia de Estados Unidos: la diferencia es la instantaneidad", ha señalado en una rueda de prensa la escritora americana.
Gabaldón ha remarcado la importancia de estar 'conectados' hoy en día permanentemente, lo que hace contextualizar el discurso de las armas en Estados Unidos con el asesinato del ex primer ministro japonés. "Esto de saber qué pasa todo el rato en el mundo es como comprimir la realidad y eso no ocurría hace tres siglos", ha señalado.
Precisamente, en 'Cuenta a las abejas que me fui', Gabaldón hace viajar a sus protagonistas, Claire y Jaime, al año 1779 al interior de Carolina del Norte. En plena Guerra de la Independencia, los personajes deberán afrontar una nueva vía de escape para la novena entrega de una saga que ya acumula más de 50 millones de lectores en todo el mundo.
"No siento ahora más presión al escribir que al principio --últimos años 80--, cuando le daba a leer los manuscritos a mi marido. Me encanta generar respuestas en los lectores y desde siempre mi intención no ha sido la de enseñar el texto a la gente antes de ser publicado, lo que me ha dado libertad", ha explicado.
De hecho, Gabaldón admite que sería "imposible escribir teniendo a alguien en mente". "Todo el mundo tiene opiniones, así que no puedo estar pendiente de qué pensarían 50 millones de personas de mis libros: si ya incluso escribir pensando en dos fans supondría atender a una diversidad de opiniones", ha bromeado.
En cualquier caso, la autora asegura que el éxito de la saga no le ha supuesto apenas cambios en su vida. Así, sigue tomándose su tiempo entre publicación de una entrega y otra --en el caso de este nuevo libro, siete años entre uno y otro--. "Pero es que este es bastante ladrillo y, cuando eres popular, a veces tienes que estar en un acontecimiento que te impide estar escribiendo", ha ironizado.
'Outlander' ha adquirido también fama por su adaptación audiovisual en Starz, un trabajo con el que la autora se muestra muy satisfecha. "Me encanta, a pesar de las limitaciones normales que tiene el no poder mostrar todo lo que viene en el libro: desde los actores hasta el guión, pasando por la producción, que da un gran realismo", ha asegurado.
Una de las cuestiones que más preocupan a los seguidores de la saga es el final, pues en repetidas ocasiones se ha señalado a la próxima entrega como la última de la serie. Gabaldón no confirma esto y deja una puerta abierta para su continuidad. "Todos los libros de la serie acaban en sí mismos, pero podría dar pie a una continuación después del siguiente: tengo 70 años y todavía me veo con fuerzas para otro, pero veremos", ha concluido.