MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
Así, la oficina del Presidente ha indicado en un comunicado que "destapará la verdad" detrás del caso y ha recalcado que los dos pescadores fueron trasladados al norte a través de la frontera intercoreana "en contra de su voluntad".
"Si fueron enviados forzosamente a Corea del Norte incluso cuando dejaron clara su intención de desertar, estaríamos hablando de un crimen que viola el Derecho Internacional y la Constitución", ha aseverado la portavoz de la Presidencia, Kang In Sun, que ha asegurado que "el Gobierno de Yoon determinará en profundidad la verdad para restaurar los valores universales de libertad y Derechos Humanos".
La postura de la Administración actual llega tras la difusión de una serie de imágenes en las que se puede ver a varios soldados forzando a los pescadores a cruzar la Línea de Demarcación Militar que separa las dos Coreas. Ambos iban con los ojos tapados y las manos atadas, según informaciones de la agencia de noticias Yonhap.
Los dos norcoreanos habían confesado haber matado a 16 miembros de la tripulación con la que trabajaban en su intento por desertar de Corea del Norte. Sin embargo, el Gobierno de Moon determinó que sus intenciones "no eran honestas" y decidió enviarlos de vuelta a pesar de las posibles represalias.
La repatriación suscitó numerosas críticas contra el Gobierno, al que muchos acusaron de favorecer a Corea del Norte con esta decisión en un intento por allanar el camino hacia la paz y la reconciliación.
Kang, sin embargo, ha indicado que la imagen de los pescadores "haciendo todo lo posible por no ser enviados a Corea del Norte difiere de las explicaciones del Gobierno de Moon, que aseguraba que no tenían intención real de desertar".