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Ahuehuete vive momentos críticos, pero tiene esperanza, aclaran especialistas

Expertos coinciden que la prioridad es proveer nutrientes, agua y que el suelo no se compacte para que el árbol se desarrolle en condiciones óptimas

Ahuehuete. A la derecha, el ahuehuete plantado el 5 de junio, a la izquierda a más de un mes de haberse plantado.

A un mes de que se plantó el ahuehuete en la Glorieta de Paseo de la Reforma, lapso en el que la planta no presenta follaje ni crecimiento, especialistas coinciden que este árbol atraviesa por un proceso de estrés y de adaptación, pero aseguran que éste florecerá en la Ciudad de México.

Para entender mejor: Dan bienvenida a ahuehuete, el símbolo que sucederá a la palma de la glorieta en Reforma

Los expertos coincidieron que fue un error que el espécimen haya sido traído desde un vivero en Nuevo León, a bordo de dos tráileres, teniendo un vivero de ahuehuetes en Texcoco, lo cual hubiera evitado estrés en su traslado, pero pronostican que se recuperará.

A pesar que las imágenes del árbol muestran resequedad, los especialistas señalaron que se debe emonitorear constantemente, proveerle el agua suficiente y nutrientes para que se desarrolle.

Daniel Rivas Torres, ingeniero forestal y arbolista certificado de la Asociación Internacional de Arboricultura y académico de la Universidad Autónoma de Chapingo (UACH), dijo que hay que darle un plazo al árbol para que éste se pueda recuperar del cambio, el cual puede ser de dos a tres meses.

Ahuehuete. Así lucia el árbol cuando fue plantado el 5 de junio de 2022.

“Es un árbol resistente, noble, siempre y cuando se hagan debidamente los trabajos. Estos árboles resultan exitosos. Las raíces en este momento están en una etapa de producir nuevas raicillas, la humedad que el ambiente les provee, las lluvias y el ambiente mismo es suficiente”.

Resaltó que fue una buena decisión sembrar el árbol antes de la temporada de lluvias, ya que tendrá mayores posibilidades, mejor provisión de agua, un ambiente más fresco y por consiguiente su recuperación será más rápida.

Aunque mencionó que después de un mes de su llegada es momento de una revisión del árbol, para conocer el estado en que se encuentra, su estado físico, sanitario y sí fue exitoso el resultado de su trasplante.

Ahuehuete. Ahora así luce el árbol en el mes de julio de 2022.

Erika Reyes González, investigadora del Centro Interdisciplinario de Investigaciones y Estudios sobre Medio Ambiente y Desarrollo (CIIEMAD) del IPN, dijo que es muy anticipado asegurar la muerte del ahuehuete, ya que no es un ser humano, sino que los árboles también reaccionan ante cambios de clima, ambientales, de pH los que les genera estrés, pero cuando éste logre adaptarse, comenzará a reverdecer, pero tomará tiempo.

Sedema está capacitada, tiene los conocimientos y su personal está preparado para realizar este tipo de trasplantes. Por lo que hay que esperar, ya que todas las plantas y árboles al sufrir un cambio de suelo, cambios climáticos, de altitud y de temperatura, llevan un procedimiento de adaptación”, resaltó.

Por su parte, Saúl Alcántara Onofre, académico de la UAM-Azcapotzalco, comentó que estos árboles se adaptan inmediatamente, se debe monitorear constantemente, no permitir que el suelo se compacte para que las raíces se afiancen en el nuevo lugar, y regarlo para que tenga la humedad que requiere el árbol para que crezca en la ciudad.

“Lo más importante es que la raíz tenga calidad de vida, para que pueda brotar nuevamente el árbol. Es un anhelo que tenemos todos de que pueda sobrevivir”

—  Saúl Alcántara

Víctor Teodoro Méndez, técnico forestal de Texcoco, detalló que la temporada de lluvias permitirá que el árbol se recupere. “El propio árbol va a reaccionar, teniendo un terreno fértil, con gran cantidad de nutrientes, un riego constante y permanente. En unos meses se va a recuperar. Son especies muy tolerantes a cambios bruscos”.

Los especialistas coincidieron en que el viaje de Nuevo León a un vivero en Nezahualcóyotl para su posterior traslado a la Glorieta de Paseo de la Reforma generó un gran estrés para el árbol, por lo que ahora la prioridad es crear las condiciones necesarias para que las raíces crezcan y se afiance en el nuevo lugar, sus hojas florezcan y el ahuehuete se desarrolle en condiciones optimas.

El ahuehuete mide 12 metros de altura y tiene una edad de 20 años, lo que lo convierte en un ejemplar muy joven, pues estos árboles viven en promedio 2 mil años. Es una especie nativa de México y alcanza una altura de hasta 40 metros, tiene troncos gruesos, hojas pequeñas y alargadas.

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