MADRID, 12 (EUROPA PRESS)
"El 14 de septiembre, fiesta de la Exaltación de la Santa Cruz, siguiendo la invitación de monseñor Gintaras Grusas, arzobispo de Vilna y presidente de la CCEE, se celebrará una jornada de oración para invocar la paz en Ucrania. La adoración eucarística es la forma común de oración elegida para esta iniciativa", ha precisado en un comunicado desde la Conferencia Episcopal de las instituciones europeas.
Así, han hecho un llamamiento para que tanto religiosos, como sacerdotes y fieles se reúnan "de rodillas ante el Santísimo Sacramento" para rezar por la paz a Ucrania.
Los obispos europeos han unido su voz a la del Papa en repetidas ocasiones para pedir el cese de las armas y el fin inmediato de la guerra en Ucrania. Este es, según sus promotores, un nuevo llamamiento con el que se pretende que los jefes de Estado y de Gobierno y la comunidad internacional hagan "todo lo que esté en su mano para poner fin a la guerra actual, que está destruyendo vidas y causa un sufrimiento incalculable".
La iniciativa de Cuaresma, denominada "cadena eucarística", está, según han explicado, "concebida como signo de la cercanía de la Iglesia de la Iglesia a las víctimas de la guerra y a sus familias, se convirtió este año en una oportunidad para rezar por las víctimas de la guerra e invocar la paz en Ucrania".
Esta iniciativa se une al gesto concreto del Papa que, por cuarta vez, ha enviado al cardenal polaco, Konrad Krajewski, limosnero pontificio, el encargado de cumplir las obras de caridad en nombre del Papa, a Ucrania,
Según informó la oficina de prensa del Vaticano, esta vez, viajará a las zonas de Odesa, Yítomir, Járkov y otros lugares del este de Ucrania" para visitar y apoyar a varias comunidades de fieles, sacerdotes y religiosos, y a sus obispos. El Vaticano ha informado de que estas personas llevan "más de 200 días, siguen permaneciendo en los lugares de su ministerio a pesar de los peligros de la guerra".
El Vaticano ha definido esta visita como "un viaje silencioso y evangélico", para estar con la gente que sufre, para rezar y consolar a cada uno de ellos, mostrando con su presencia que no están solos en esta situación que está trayendo sólo destrucción y muerte.
El cardenal polaco llevará hasta Ucrania "ayudas concretas a través de las Cáritas de las distintas diócesis".