La Gira de la PGA ha presentado una contrademanda en la que señala que la serie LIV Golf, financiada por Arabia Saudí, ha inducido a que algunos de los principales golfistas violen los términos de los contratos con esa primera organización al negar que fuera posible obligar a su cumplimiento.
La contrademanda fue incluida en la respuesta de la Gira de la PGA a una denuncia antimonopolio enmendada que se interpuso ante una corte federal en el norte de California. Entre las personas y grupos que presentaron esa primera demanda figura LIV Golf.
Desde entonces, ocho de los 11 jugadores que demandaron a la PGA, incluido Phil Mickelson, han pedido que se les retire del grupo de denunciantes. Mickelson dijo que su participación no era necesaria ya, dado que LIV Golf estaba ahora demandando a la gira.
En la respuesta presentada el miércoles por la noche, la PGA afirma que LIV Golf pide a la corte invalidar sus regulaciones “de un plumazo” tras inducir a que varios golfistas se marcharan con contratos por cientos de millones de dólares provenientes del Fondo de Inversiones Públicas de Arabia Saudí.
La Gira añadió que tres jugadores que siguen siendo parte de la demanda antimonopolio —Talor Gooch, Peter Uihlein y Matt Jones — “quieren enriquecerse incumpliendo absolutamente las promesas que hicieron" a la PGA cuando se unieron a ésta.
“Este caso no es sobre competencia injusta —si alguien compite injustamente es la LIV, no la Gira. En vez de ello, hay aquí un intento cínico por evitar la competencia y por liberarse de la inversión que ha realizado la Gira en el desarrollo del golf profesional”, indica la respuesta.
La contrademanda alega que hubo una “interferencia ilícita con un contrato”.
Entre otras cosas, la Gira afirma que LIV golf pagó bonificaciones por la firma de contratos —a veces de unos 150 millones de dólares según algunos reportes— e hizo planteamientos falsos a los golfistas para que rompieran los contratos que tenían con la Gira.
La PGA pidió un juicio sobre la contrademanda, y busca indemnizaciones por ganancias perdidas así como daños en su marca y reputación. Exige también compensaciones punitivas y el pago de los honorarios de sus abogados.