MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
Partido frenético en el Power Horse Stadium, con un Almería que pasó por encima del Girona en la primera mitad con los goles de Baptistao, Touré y Emarba, pero que no supo aguantar su ventaja ante los catalanes, que estuvieron a punto de obrar el milagro con los goles de Riquelme y Stuani, que llegó a fallar un penalti. Con el tiempo de descuento casi cumplido el colegiado anuló el tercero de los gerundenses.
El conjunto local pronto se aprovechó de los desajustes defensivos del Girona y tras una gran jugada de Mendes por banda derecha, centró al área para que Leo Baptistao, completamente solo, marcara de cabeza (1-0).
Aún estaba celebrando el Almería el primero cuando otro grave error de los catalanes permitió el segundo de los locales. Un balón en largo de Fernando confundió a Bernardo, que no se entendió con su portero y tras despejar a su propia portería, lo aprovechó El Bilal Touré para marcar el segundo.
No levantó cabeza el Girona que vio como Embarba hurgarba aún más en la herida y convertía un falta lejana en el tercero de los suyos y posiblemente en el gol de la jornada. Stuani pudo recortar distancias pero el VAR avisó al colegiado de la posición antirreglamentaria del charrúa.
Sirvió la charla de Míchel en el descanso para que los suyos salieran con ganas del túnel de vestuarios. Apenas transcurrido un minuto de la segunda mitad los catalanes armaron una veloz contra que culminó Riquelme. El hombre de moda en Girona aprovechó la mala posición de Fernando para recortar distancias.
El ímpetu visitante volvió a encontrar su premio en forma de penaltis, y aunque Fernando adivinó el primero a Stuani, el destino le regaló otra pena máxima tan solo cinco minutos después, para que, ahora sí, el charrúa fusilara al meta almeriense y pusiera el 3-2.
Con la miel en los labios se quedaron los de Míchel cuando en el último minuto del añadido Herrera anotaba el empate. Sin embargo, tras el aviso del VAR, el colegiado acabó señalando falta al portero. El Almería coge aire, sale y se aleja de los puestos de descenso, mientras que el Girona ya es antepenúltimo y todavía no sabe lo que es ganar fuera de casa.
OSASUNA SUPERA SU MALA RACHA Y SE ASOMA A EUROPA
Por otro lado, Osasuna venció por la mínima a un pobre Espanyol, en un partido descafeinado que no encontró el premio del gol hasta la segunda mitad, donde los navarros supieron aprovechar mejor sus opciones para llevarse el partido.
Tras una primera parte sin mucho brillo y donde la falta de ritmo de ambos conjuntos sobresalió por encima del resto, los navarros, con Ez Abde a la cabeza, llevaron la iniciativa del juego. De las botas del marroquí surgió la mejor ocasión local, pero tras zafarse de tres defensas, acabó golpeando el balón en un defensor perico. Cabrera tuvo la ocasión de adelantar a los suyos al borde del descanso pero el paradón de Aitor evitó que su remate de cabeza se colara entre los tres palos.
Cambió el guión en la segunda parte, y los locales pronto encontraron la recompensa al buen juego que empezaban a mostrar. Abde aprovechó un córner en corto para poner un balón al punto de penalti donde Budimir, tras ganar en el salto a su marca, conectó un testarazo a la escuadra del Espanyol.
Aitor evitó el empate periquito con el pie tras un buen balón de Braithwaite que Joselu definió raso, pero finalmente los de Arrasate supieron aguantar su renta e incluso David García tuvo el 2-0 pero su cabezazo se estrelló en la madera. Osasuna pone fin a su mala racha de cuatro encuentros sin ganar y se asoma a los puestos europeos, mientras que el Espanyol mira hacia abajo y junto con el Getafe, marcan la salvación (9).