MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
Las autoridades de Sudán del Sur han informado de nuevos enfrentamientos intercomunitarias en Alto Nilo, en el noreste del país, que han dejado al menos 19 personas muertas y un balance total de más de 140 fallecidos desde el pasado mes de julio.
Los enfrentamientos intercomunales entre las tribus Hausa y Hamaj comenzaron en la localidad de Wad Al Mahi en julio y provocaron el desplazamiento de cerca de 64.800 personas, así como más de 120 heridos hasta el 6 de octubre, aunque estos números podrían ser mayores, según ha informado la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios.
Mientras continúa la violencia entre las tribus miseriya y nuba en la localidad de Al Lagowa, en Kordofán Occidental, al menos 36.500 personas han huido de la ciudad. La Comisión de Ayuda Humanitaria (HAC) del Gobierno del estado ha informado de que 19 personas han muerto y 34 han resultado heridas durante el conflicto en las últimas semanas.
Al Lagowa fue bombardeada el martes con artillería pesada, tras lo que las autoridades locales decidieron evacuar por precaución a cerca de 11.000 personas -- que representan más de 2.100 hogares-- hacia una base militar cercana, a las afueras de la ciudad.
Según informes de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), otras 15.000 personas habrían huido a las montañas al este de la ciudad. Asimismo, al menos 300 personas se han desplazado hacia la localidad vecina de Keilak, mientras que otras 450 estarían refugiadas en Ar Reif Ash Shargi y Dilling, en el estado de Kordofán del Sur.
Según informes no confirmados, aunque recogidos en un comunicado por la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios, el pasado 13 de octubre, dos personas fueron asesinadas en una localidad cercana a Wad Al Mahi debido a una disputa sobre cuestiones de tierras.
Sudán del Sur cuenta con un Gobierno de unidad que echó a andar tras la materialización del acuerdo de paz firmado en 2018 por el presidente, Salva Kiir, y el líder rebelde Riek Machar, quien fue nombrado nuevamente para el cargo que ocupaba antes de la guerra civil. Entre los principales puntos pendientes figura la unificación de las fuerzas de seguridad, prevista para noviembre.