MADRID, 2 (EUROPA PRESS)
Esta negativa choca contra la petición formulada por el Parlamento europeo a finales de octubre, por la que instaba de nuevo a los Estados miembro de la UE a permitir que Rumanía y Bulgaria se unan al espacio Schengen "cuanto antes", con vistas a que puedan incluso eliminarse las restricciones a la movilidad con estos dos países a principios de 2023.
Los eurodiputados a favor de la incorporación mantienen que las restricciones para Rumanía y Bulgaria implican un trato discriminatorio que, en la práctica, tiene un "grave impacto" en la movilidad de ciudadanos y en el transporte de mercancías. Ello conlleva a su vez perjuicios para el mercado único europeo, reza el texto, sobre una zona cuya protocolo de adhesión necesita de un voto unánime.
El primer ministro neerlandés, Mark Rutte, ha explicado en rueda de prensa recogida por el porta Dutch News que la decisión de no apoyar la petición de Bulgaria se basa en hechos consumados y no es una decisión política. "Hemos adoptado un enfoque decente", ha declarado el primer ministro, cuyo gobierno sigue percibiendo deficiencias técnicas en la propuesta búlgara y ha pedido además más investigaciones sobre la corrupción y el crimen organizado en el país.
Rutte, en declaraciones recogidas por Bloomberg, ha señalado de todos modos que este bloqueo no debería afectar a largo plazo las aspiraciones búlgaras de incorporación, si bien es un tema que volverá a ser discutido en Bruselas el próximo 8 de diciembre, durante la reunión de ministros de Justicia de la UE.