MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
"Fulani, quien ha recibido injustamente el torrente de abusos más espantoso en las redes sociales y en otros lugares, ha aceptado esta disculpa y aprecia que no hubo mala intención", ha dicho en un comunicado el Palacio de Buckingham.
En este sentido, la Casa Real británica ha resaltado que tanto Fulani como Lady Sussan buscan "paz", así como "reconstruir sus vidas", después de un "período intensamente angustioso para ambas". De esta decisión también han sido informados el rey Carlos III y la reina consorte, Camila.
"Esperan que su ejemplo muestre que se puede encontrar un camino hacia la resolución con amabilidad, cooperación y la condena de la discriminación donde sea que se arraigue", ha señalado en un comunicado Buckhingham.
Hussey, antigua asistente personal de la difunta Isabel II y madrina del príncipe Guillermo, le preguntó insistentemente a Fulani sobre su "procedencia", ante lo que ella contestó que era británica y que sus padres "habían venido en los años 50" a Reino Unido.
No es la primera vez que la sombra del racismo sobrevuela la Casa Real británica más allá de su pasado colonial, ya que en una muy comentada entrevista a la televisión estadounidense de los duques de Sussex, Enrique y Megan, esta aseguraba a la presentadora Oprah Winfrey que le constaba que en el seno de la familia real preocupaba el hecho de que sus hijos no fueran lo suficientemente blancos.