La Armada de Estados Unidos parece haber aprendido las lecciones de los costosos errores de atiborrar sus naves con tecnología excesiva y acelerar su producción, al iniciar la construcción de los nuevos destructores que son la columna vertebral de la flota.
Oficiales navales dicen que están retardando el diseño y compra de los destructores de la próxima generación para garantizar que los láser poderosos y los misiles hipersónicos estén en condiciones de ser utilizados antes de avanzar en la fabricación.
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La Armada ha aprendido, “a veces a los golpes, que cuando avanzamos demasiado rápidamente cometemos grandes errores”, declaró el almirante Michael Gilday, jefe de operaciones navales.
“Seamos prudentes. No nos dejemos llevar por lo primero que vemos”, agregó Gilday la semana pasada durante un evento para directivos de la industria de la defensa en San Diego. La Armada quiere dar vuelta la hoja luego de errores recientes de construcción naval.
Varias naves de combate diseñadas para ser veloces están siendo retiradas porque tienen demasiados desperfectos. Un portaviones de 13 mil 300 millones de dólares sufrió un aumento de costos debido a las nuevas catapultas de lanzamiento de aviones. Cuando se completó la fabricación de un nuevo destructor furtivo, fue necesario cambiar todo su armamento.
Para la nueva embarcación, la Armada está reduciendo los riesgos con más ensayos en tierra y tomando los sistemas de radar y búsqueda de blancos de los destructores que incorporará próximamente a la flota, precisó el capitán de corbeta Javan Rasnake, vocero del subsecretario de la Armada a cargo de investigación, desarrollo y adquisición.
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También está trabajando con los astilleros y diseñadores para afinar los planos, estimaciones de costo y previsiones de personal y aprovisionamiento. De todas maneras, la Armada piensa incluir algo de tecnología de punta en el destructor.
La semana pasada, otorgó a Lockheed Martin un contrato de mil 200 millones de dólares para misiles hipersónicos, capaces de alcanzar cinco veces la velocidad del sonido y que se pueden disparar desde los destructores.