MADRID, 24 (EUROPA PRESS)
Este ligero incremento contrasta con el dato del 4% que se dio en el país sudamericano en el año 2021, tras recuperarse de la crisis económica derivada de la pandemia.
Por el lado de la demanda, según ha confirmado este viernes el Banco Central de Paraguay, los componentes con incidencias positivas han sido el consumo privado (2,2%) y las importaciones (5,6%). Mientras, el gasto público y las exportaciones han incidido de forma negativa (con caídas del 5,7% y 1,6%, respectivamente).
CRECIMIENTO DEL 1,7% EN EL CUARTO TRIMESTRE
En lo que se refiere al cuarto trimestre, el PIB de Paraguay se incrementó un 1,7%, siendo la segunda mejor cifra del año, tras el repunte del 2,9% del tercer trimestre. En la primera mitad del año, la actividad económica de Paraguay tuvo un desempeño negativo.
En este último trimestre, la construcción y la industria manufacturera obtuvieron los peores resultados (con caídas interanuales del 13,1% y 4,3%, respectivamente). Mientras, la actividad agrícola se expandió un 48%.
Entre los componentes de la demanda, las importaciones (con una contracción del 8,3%), el consumo público (del 11,2%) y la formación bruta de capital (del 13,4%) impidieron un mayor incremento.
De cara a 2023, organismos como la Cepal prevén que la economía de Paraguay crecerá un 4%, frente al resultado negativo que estimaban para el 2022. El Banco Mundial es incluso más optimista, y calcula una expansión del PIB del 5,2%.
