El secuestrador Daniel Arizmendi, “El Mochaorejas”, su hermano Aurelio y tres de sus cómplices consiguieron que se repusiera uno de los procesos legales que se sigue en su contra, pues alegaron que fueron torturados.
El amparo fue otorgado por un tribunal federal; sin embargo, esto no implica que esas personas vayan a quedar en libertad.
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La magistrada Isabel Cristina Porras fue quien hizo la propuesta de amparar a los quejosos, los magistrados del Cuarto Tribunal Colegiado en Materia Penal de la Ciudad de México respaldaron su propuesta por unanimidad.
En ella se estableció que se investigue si se cometieron actos de tortura en contra de Arizmendi y sus compañeros para confesar sus plagios. El secuestrador está sentenciado a 393 años de prisión.
La magistrada precisó que el amparo a los Arizmendi y cómplices es para efectos, por lo que en ningún caso tendría como resultado que se les pusiera en libertad.
A finales del 2021 la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) rechazó atrae el caso de los hermanos Arizmendi, quienes aseguraban que hubo irregularidades y violaciones al debido proceso.
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Según los Arizmendi, quienes estaba considerados los secuestradores más peligros de México al final de los 90, por lo que la entonces Procuraduría General de la República (PGR) los consideró los hombres más sanguinarios de la banda, aseguraron que no tuvo una defensa adecuada tras su detención.
En la banda del conocido como “El Mochaorejas” estaban sus hijos y hermano, su captura se convirtió en prioridad para las autoridades.
En marzo de 1997 se formó un grupo especial con agentes de la policía Judicial Federal, del Estado de México y del entonces Distrito Federal para atraparlo.
Más de un año después, el 17 de agosto de 1998 “El Mochaorejas” fue detenido de una casa de seguridad en Naucalpan, Estado de México y ahora purga una condena de más de 300 años de prisión.