MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
Un total de 362 bomberos están movilizados para combatir este incendio que está descontrolado. La intervención se ve dificultada por el viento, que sopla a 80 km/h, que impide la intervención de medios aéreos, según recoge la televisión francesa BFMTV. No hay previsión de que este viento amaine en las próximas horas.
La intervención de los bomberos "ha permitido proteger y salvar un centenar de viviendas" así como un centro de vacaciones "y todo el pueblo de Cerbère, que sin la intervención probablemente habría sido devorado por las llamas", ha destacado en rueda de prensa el prefecto de Pirineos Orientales, Rodrigue Furcy. "Todavía estamos combatiendo el fuego, en un incendio que parece un incendio de verano", ha destacado Furcy.
El fuego ha afectado a dos viviendas y un bombero ha tenido que ser atendido por inhalación de humo, pero "no hay lesionados entre la población", ha explicado el prefecto. Hasta 300 personas han sido evacuadas y 180 están confinadas en la localidad de Cerbère.
El fuego se ha extendido hasta cruzar la frontera, por lo que un total de 39 dotaciones terrestres de los Bombers de la Generalitat han sido movilizadas para evitar que avance el incendio tras llegar a Portbou (Girona) en la tarde del domingo. El cuerpo también trabaja en la zona con un helicóptero de rescate, ha informado en un tuit recogido por Europa Press.
El fuego ha bajado por el Puig de l'Àliga y se encuentra cerca del pantano de Portbou, desde donde los Bombers intentan frenarlo "para que no pase a la vertiente sur de la montaña".
El Ministro del Interior francés, Gérald Darmanin, ha anunciado que se desplazará este lunes hasta la zona para supervisar las labores de extinción de este "incendio de vegetación".
El meteorólogo Patrick Marlière ha recordado además la sequía que afecta a la zona que implica un déficit hídrico "muy marcado" y "acumulado desde hace varios meses". No hay previsión de que la situación mejore en los próximos días o semanas.