ATENAS (AP) — La campaña para las elecciones de Grecia el 21 de mayo empezó el sábado con la disolución del parlamento que fue elegido en julio de 2019.
El primer ministro Kyriakos Mitsotakis se reunió con la presidenta Katerina Sakellaropoulou para proponer la disolución del parlamento y ella aceptó, como requiere la constitución. Mitsotakis declaró que al faltar menos de tres meses para que concluyan los períodos de cuatro años de los legisladores, las elecciones del mes próximo no serán consideradas comicios adelantados.
Poco después de su reunión con la presidenta, Mitsotakis dio un discurso por televisión en el que defendió lo logrado por su gobierno. Enumeró una lista de logros y de desafíos por venir, y buscó dar argumentos para un gobierno estable a futuro.
Sin embargo, será difícil que su partido Nueva Democracia logre seguir en el poder como gobierno unipartidista. Las elecciones legislativas del mes entrante serán las primeras del país bajo un sistema de representación proporcional, y las encuestas muestran que ninguno de los partidos cuenta con mayoría decisiva.
Los expertos también consideran poco probable una alianza entre Nueva Democracia, el centroizquierdista Syriza y el Movimiento Socialista Penhelénico (PASOK).
En tal caso, se realizarían otros comicios a inicios de julio. Una reforma a las leyes electorales le daría al ganador de esos comicios una ventaja de 30 escaños. Pero incluso esa segunda elección podría no arrojar una clara mayoría en el parlamento griego de 300 escaños.
Desde ya se ha mencionado la posibilidad de una tercera elección, aunque los expertos coinciden en que un período prolongado de incertidumbre sería perjudicial para la economía y la gobernabilidad del país.