MANILA, Filipinas (AP) — El tifón Doksuri azotó el miércoles las provincias del norte de Filipinas con fuertes vientos y lluvias, dejando por lo menos seis personas muertas y desplazando a miles. La tormenta desprendió techos de las viviendas, inundó poblados ubicados en zonas bajas y ocasionó decenas de aludes, informaron las autoridades.
Un alud enterró una casa en la localidad de Buguias, en la provincia de Benguet, causando la muerte de una madre, su hijo y otros dos niños, y heridas a dos personas más. En la aledaña ciudad de Baguio, un joven de 17 años falleció cuando la tierra removida por las fuertes lluvias sepultó su casa, según las autoridades.
En la provincia de Isabela, también en el norte de Filipinas, una mujer que vendía pan en una bicicleta murió cuando fue impactada en la cabeza por la caída de una palmera, de acuerdo con un reporte policial.
El tifón azotó la Isla de Fuga antes del amanecer y posteriormente impactó otra isla en la provincia de Cagayán, donde aproximadamente 16.000 personas fueron evacuadas de localidades costeras de alto riesgo; las escuelas y oficinas cerraron como medida de precaución.
Miles de personas se vieron afectadas por las inundaciones y otros problemas causados por el tifón, que tiene una banda de viento y lluvia de 700 kilómetros (435 millas) de ancho, dijeron rescatistas.
Doksuri se debilitó un poco, pero se mantuvo como un meteoro peligroso y potencialmente letal con vientos máximos sostenidos de 175 kilómetros por hora (109 millas por hora) y ráfagas de hasta 215 km/h (133 mph). Soplaba a 95 kilómetros (59 millas) al oeste de la isla de Calayán, frente a Cagayán, el miércoles por la noche, informaron los meteorólogos.
“Nuestras localidades costeras en el norte están siendo azotadas”, dijo el gobernador de Cagayán, Manuel Mamba, el miércoles temprano en entrevista telefónica con The Associated Press. “Estoy recibiendo reportes de techos de lámina que fueron desprendidos e inundaciones que no han podido drenarse probablemente por las marejadas que llegan del mar”.
Mamba teme que se produzcan afectaciones importantes en las granjas de maíz y arroz del valle de Cagayán, las cuales ya habían sido castigadas por una sequía de un mes antes de la llegada de Doksuri. Al menos cuatro localidades enteras se quedaron sin electricidad y seis puentes eran impracticables debido a las inundaciones, según un reporte preliminar de daños de las autoridades en Cagayán.
“Se anticipa que continúen las condiciones violentas y potencialmente mortales” el miércoles en el noroeste de Cagayán y las islas Babuyan, así como en las regiones montañosas del norte en las provincias de Apayao e Ilocos Norte, según un aviso de la agencia meteorológica del país.
___
Huizhong Wu en Taipéi y Joe McDonald en Beijing contribuyeron a este despacho.